Estrés: deteriora mente y cuerpo de los policías
| Autor | Andrés Zúñiga |
Ante la presión constante con que laboran a diario, los policías están expuestos a sufrir enfermedades físicas y padecimientos mentales que no sólo redundan en un deterioro de su personalidad, sino también en su rendimiento laboral.
Francisco Gutiérrez Rodríguez,especialista en salud mental de la UdeG y Javier Aguilar Barragán, especialista en medicina del trabajo del IMSS, coincidieron que el policía al no contar con la capacitación de tipo humano para enfrentar el estrés están a expensa de que al paso del tiempo su salud decaiga y con ello sus relaciones laborales y de familia.
Según estudios realizados por Gutiérrez Rodríguez a elementos de varias corporaciones, el 10 por ciento de los policías que tienen entre 10 y 15 años de servicio presentan daños severos que han redundado en diversas enfermedades.
"Estamos hablando de problemas circulatorios que pueden ser un factor de riesgo para problemas cardiacos, estamos hablando de problemas en el aparato digestivo como úlceras, gastritis, dolor de cabeza generalizado, dolores de articulaciones, agotamiento emocional en el sentido que las jornadas de descanso (sueño) ya no son reparadoras", apuntó.
El 12 por ciento de los uniformados que tienen de 5 a 10 años laborando presentan un proceso de deterioro mental que se manifiesta en irritabilidad ocasional y descontrol de impulsos eventuales.
Durante este período se concientizan que su profesión repercute en varias cuestiones de su vida familiar por lo que solicitan apoyo en áreas como jurídica, sicológica, de defensa personal o piden cierto tipo de capacitación que les dé una sensación de seguridad.
Los policías de reciente ingreso, es decir que tienen menos de 5 años trabajando, no presentan algún tipo de deterioro mental ni físico, al contrario, se les ve con una alta motivación para el trabajo, sensación de vigor, mucha necesidad de capacitación en el área humana y operativa, según el estudio hecho por Gutiérrez Rodríguez.
Sin embargo, muchos de los agentes más novatos no tienen conciencia plena de que a largo plazo la violencia y el estrés pueda deteriorarlos puesto que no perciben su profesión como de alto riesgo.
Ante una situación de peligro y la falta de capacitación para controlar este tipo de situaciones, el policía se ve afectado en la concentración, su capacidad de respuesta de forma inmediata y acertada así como la toma de decisiones que pone en riesgo su vida.
Como parte del estudio que realizó, Gutiérrez Rodríguez señaló que los...
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