Los estragos de “Manuel” en 2013

MÉXICO, D.F., diciembre 24 (EL UNIVERSAL).- Los fenómenos meteorológicos pusieron a prueba durante este año la coordinación entre los distintos órdenes de gobierno en materia de protección civil en México.

Tormentas tropicales como “Ingrid” en la costa del Golfo de México, y “Manuel” en el litoral del Pacífico pusieron en alerta a diversas comunidades y autoridades de distintos niveles de gobierno.

Con un saldo de al menos 12 mil damnificados tan sólo en el estado de Guerrero por las lluvias torrenciales que se registraron a mediados de septiembre, las consecuencias de “Manuel” en diferentes municipios de esta entidad aun generan reclamos en la zona de la montaña, históricamente ligados a la carencia de servicios.

- El “grito” de la naturaleza

La noche del 15 de septiembre, mientras las cadenas de televisión transmitían las ceremonias de El Grito de Independencia desde las principales plazas del país, en la comunidad de La Pintada, municipio de Atoyac de Álvarez, en la montaña guerrerense un deslave de tierra de uno de los cerros aledaños sepultaba un tercio de las casas con sus habitantes en el interior.

Ante la inminencia de la fuerza con que el fenómeno meteorológico azotaría la entidad el gobernador Ángel Aguirre y el alcalde de Acapulco, Luis Walton, decidieron suspenden las celebraciones nacionales y enfocar los esfuerzos de sus administraciones en la atención para las lluvias.

La distancia y el aislamiento que el colapso de la infraestructura carretera entre La Pintada y la cabecera municipal de Atoyac, hicieron que las primeras solicitudes de ayuda y la primera noticia de la catástrofe se dieran tres días después del derrumbe.

Luego de la muerte de las 71 personas de La Pintada y la evacuación de 300 de sus habitantes, la población de este municipio se formó por un albergue localizado a unos metros de donde pasó el alud. A esto se sumó el torrente de reclamos.

"Demandamos un canal común de información y toma de decisiones, y la creación de un comité de concertación de esfuerzo, de inmediato exigimos la edificación del campamento provisional para que volvamos a nuestra tierra, participemos en la búsqueda de los sepultados, en la construcción de lo que vayamos a construir y exigimos la apertura de una averiguación ministerial para localizar y castigar a los posibles responsables de los saqueos que han ocurrido", reclamó Cesáreo Moreno Ávila, uno de los sobrevivientes y presidente del comité "Pro Pintada".

- Acapulco, paraíso bajo lodo

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