Estimulación temprana: Un buen comienzo
| Autor | Margarita Reza |
Fomentar el desarrollo intelectual, afectivo y social de un hijo para que en el futuro sea todo un triunfador es el sueño de todo padre; sin embargo, no es tarea fácil, ya que se requiere de un conocimiento pleno de las capacidades y habilidades del menor para darle el apoyo y sostenimiento adecuados, que le permitan tener confianza en sí mismo y buscar por sí solo su mejor camino.
Una forma de lograrlo es la llamada estimulación temprana, una terapia que, si se enfoca correctamente, hará posible formar niños de alto nivel.
Es mucho más que una moda; desarrollar adecuadamente las cualidades de un pequeño es importante para que él aprenda a manejar su cuerpo, tenga seguridad y autoestima, señaló la terapeuta Laila Anguiano, vocera de Fisher Price.
Durante los primeros tres años de vida, el ser humano empieza absorber lo que tiene a su alrededor, agrega Anguiano, en etapas primarias se desarrollan entre el 70 y 80 por ciento de sus capacidades. Además es el momento en que comienza a conceptuar las cosas, por lo tanto hay que ponerle mayor atención, para que más tarde pueda entender y trabajar estructuras más complejas.
La estimulación temprana tiene como objetivo principal brindar a un pequeño las experiencias necesarias para que desarrolle sus capacidades intelectuales, memoria y conocimiento individual conforme cada una de sus etapas. Se busca, ante todo, crear un patrón de aprendizaje basado en la captación, información y procesamiento.
Esta técnica no se limita a ejercicios físicos, sino que fomenta un mejor manejo del lenguaje, la motricidad fina y gruesa, la inteligencia y resolución de problemas.
Existen centros especializados donde enseñan a la madre a distinguir las características peculiares de su niño, de tal manera que pueda desarrollar las cualidades de su bebé por medio de ejercicios sencillos que se pueden realizar en casa, sin lastimar o cansar demasiado al pequeño.
También hay clases personalizadas que le permiten, tanto a la mamá como a su pequeño, realizar una gran cantidad de actividades que motivan al bebé a descubrirse a sí mismo y a comprender que cada movimiento tiene una finalidad.
Anguiano señaló que entre las actividades están escuchar música; pintar, lo que desarrolla su creatividad; subir escaleras, que le ayuda al dominio de su propio cuerpo, y brincar o caminar.
Para las que trabajan
Todos los niños necesitan de desarrollar sus potencialidades, de lo contrario su desarrollo se verá afectado.
"Un pequeño que se...
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