Estallan en pánico
| Autor | Jorge Escalante |
Corresponsal
SALAMANCA, Guanajuato.- Gloria Banda Ortega creyó que estaba haciendo erupción el volcán de Valle de Santiago.
El estruendo sacudió su vivienda y rompió cristales de la ventana.
"José ¡despierta!, está haciendo erupción el volcán", le dijo a su esposo José Briones, apenas pasada a la una de la madrugada.
Junto con sus dos hijas salieron al patio de su casa ubicada en la Colonia Humanista, de esta ciudad. Desde ahí observaron la enorme llamarada.
No era del volcán, sino del gasoducto de Petróleos Mexicanos que estalló apenas a unos cuatro kilómetros de distancia.
"Fue impresionante, pensamos que íbamos a volar, nos asustamos mucho, nos cambiamos lo más rápido posible, sacamos los documentos más importantes y salimos corriendo al centro de la ciudad.
"Buscamos a unos tíos y nos quedamos con ellos un rato, después de cinco horas intentamos regresar a nuestra casa pero el Ejército no nos dejó, entonces nos refugiamos aquí en el albergue", relató Gloria.
La familia Briones Banda no fue la única que escuchó las explosiones y salió corriendo buscando refugio.
María Lucía Sánchez Rivera, viuda desde hace un año, llegó a sentir el calor de las flamas que se levantaron más de 60 metros.
Ella es habitante de la comunidad de Santo Domingo, ubicada apenas a dos kilómetros de donde ocurrió la explosión.
La señora tomó en brazos a sus nietas y caminó más de cuatro kilómetros para alejarse del siniestro.
"Vi el fuego, pensé que nos alcanzaba, lo primero que hice fue correr, el fuego era más grande que las torres de alta tensión, me dije: si no salgo, aquí nos morimos", narró.
En un lapso de 20 minutos, además de la explosión cerca de Salamanca, hubo tres siniestros más en Celaya, y una fuga en el municipio Valle de Santiago.
De acuerdo con el Secretario de Seguridad Pública del Estado, Baltasar Vilches, en total se evacuaron 11 colonias y comunidades rurales y a 5 mil personas de los tres municipios.
Dos horas después de ocurrida la primera explosión, la Coordinación Estatal de Protección Civil inició la evacuación de personas, para entonces, la mayoría de los habitantes habían decidido, por su voluntad, alejarse de las zonas del siniestro.
En Celaya y Salamanca el temor se apoderó de cientos de familias que buscaron un refugio seguro.
Algunos se trasladaron en sus vehículos a la ciudad de Irapuato.
A través de la radio y televisión local, Protección Civil del Estado llamó a la calma a los habitantes de los tres municipios.
"No hay peligro de...
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