Escalera al cielo / 1926, 1959, 1995

AutorSergio González Rodríguez

La forma como entendemos lo que acontece ha ocupado a los historiadores al grado de que, alguno, como Hans Ulrich Gumbrecht, propuso examinar un año en que están ausentes grandes sucesos para tratar de explicar el acertijo ante el tiempo.

Gumbrecht publicó In 1926. Living at the Edge of Time (Harvard University Press, 1997). Aquello que sincroniza con los fenómenos cotidiano se convirtió en la materia de su propuesta: gramófonos, jazz, boxeo, baile, etcétera.

A partir de fenómenos semejantes, Gumbrecht construyó una especie de catálogo azaroso donde cada fragmento constituye un episodio o historia con la finalidad de producir o traer de nuevo la sensación de estar en 1926.

En 1926 (que la Universidad Iberoamericana tradujo al español en 2004), hay un registro del acontecimiento desprovisto de narrativas o marcos generales que encaucen la recepción de los fenómenos que emblematizan la ocurrencia del tiempo. Lo nuevo se encima en lo conocido.

Leo en el estupendo libro de Slavoj Zizek Acontecimiento (Sexto Piso) la siguiente definición: "el acontecimiento es el efecto que parece exceder a sus causas -y el espacio de un acontecimiento es el que se abre por el hueco que separa un efecto de sus causas". Lo que Gumbrecht hizo en 1926 incurre en la segunda parte de la formulación de Zizek, y su resultado es, más que referencial, indicial: sus ejemplos son indicios de lo acontecido. Su forma de leer la historia apunta a la idea de simultaneidad que, cada vez más, cobra protagonismo en el entendimiento colectivo de lo que sucede desde el uso de Internet y las nuevas plataformas de la información y la comunicación.

En contraste, acaba de publicarse el libro de W. Joseph Campbell titulado 1995 (University of California Press), que parece tomar la primera parte de la idea de Zizek: los efectos de aquel año explosivo que resuenan hasta la actualidad, y que resume en el subtítulo "El año en el que el futuro comenzó". ¿A qué acontecimientos se refiere Campbell? Al despliegue de Internet, el atentado terrorista en Oklahoma, el juicio hipermediático al jugador de futbol O.J. Simpson por el asesinato de su esposa y un amigo, a los tratados de paz por la guerra de Bosnia y al escándalo del presidente Clinton con la becaria Monica Lewinsky.

Campbell precisa que 1995 no es un diario, tampoco un almanaque ni una crónica detallada de aquel año, sino una narrativa que incluye testimonios y anécdotas que ayudan a capturar el "vigor, espíritu, sospechas y novedades"...

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