Es vital un diagnóstico certero
| Autor | Jorge Alberto García |
Un trastorno del aprendizaje impacta el rendimiento escolar debido a las dificultades para alcanzar objetivos escolares simples, como leer o escribir correctamente.
De acuerdo con María Guadalupe García Palacios, pedagoga y docente en el Colegio Bilingüe Madison La Herradura, los trastornos del aprendizaje siempre han estado presentes y algunos se han intensificado en los últimos años por distintas causas.
"Antes se enseñaba más la escritura cursiva y gracias a ella se podían resolver problemas como la disgrafía, por el tipo de trazo que se tiene que hacer", recuerda.
También a causa de la evolución tecnológica, observa, se han elevado trastornos como el déficit de atención, debido a las enormes cantidades de información que ahora se procesan.
"Hace 15 años, los niños recibían sólo 100 ó 120 estímulos por minuto frente a una computadora y ahora captan más de 300 estímulos por minuto.
"Esta hiperestimulación ha disparado este problema en menores de 5 años, porque tienen conflictos para procesar información", lamenta García Palacios.
Los primeros síntomas pueden manifestarse alrededor de los 5 años durante la etapa preescolar, ya que ahí se utiliza un sistema más lúdico que permite detectar el problema.
"Usualmente, la primera en enterarse es la maestra, quien informa a los padres que el niño se encuentra un poco más atrás de lo esperado en la adquisición de conocimientos", expresa la psicopedagoga Priscila Medina Regalado.
La especialista hace hincapié en diagnosticar al niño de manera certera por medio de entrevistas a él y a sus papás para conocer a fondo su situación.
"Lo mejor es canalizar al niño con personas con la preparación adecuada, como terapeutas y pedagogos", indica.
DAÑO PSICOLÓGICO
Aunque el trastorno es un problema serio que debe atenderse, más grave puede ser el impacto psicológico que provoca en el pequeño, afirma Medina Regalado.
"Algunos papás se frustran y lo presionan para que obtenga mejores calificaciones a como dé lugar, añadiendo más tensión al niño y llevándolo irremediablemente al fracaso.
"Toman esta ruta porque creen que no salió bueno para la escuela, cuando en realidad deben poner atención a sus necesidades emocionales para que salga adelante", sostiene.
Otro problema común es el bullying que también padecen niños con algún trastorno de aprendizaje.
Sus compañeros se burlan de él, lo cual lo desanima y comienza a aislarse socialmente. Después le dice a sus padres que no quiere ir al colegio.
"Puede ser que con...
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