'Es mejor corregir'

AutorAlejandra Ordóñez, Israel Martínez y Mariel Ibarra

Dar explicaciones, hablar en voz alta y hasta propinar unas nalgadas, son recursos que los padres de familia utilizan para corregir a sus hijos cuando cometen travesuras que tienen un sentido grave.

Algunos papás explicaron que reprenden de acuerdo al grado de la diablura que hayan hecho, tomando en cuenta la edad y el carácter del niño.

Aunque algunos admiten recurrir a los castigos, otros, como Sandra Durán, no regañan a sus hijos aunque sean muy latosos porque, aseguró, a través de sus "actos ingeniosos" experimentan y aprenden.

"Yo les dejo hacer todo porque tienen derecho a jugar y ha hacer lo que quieran, si los empiezo a reprimir van a crecer frustrados", comentó Durán, quien tiene una niña de 8 años y un niño de 9.

Retirarles lo que más disfrutan hacer, prohibirles practicar su videojuego favorito o no permitirles realizar actividades artísticas, son otras medidas que las mamás aplican cuando los hijos se exceden en sus travesuras.

Ana Luisa Luna, emplea el diálogo permanente con su hija de 8 años para evitar que abuse de su confianza o desobedezca sus indicaciones, aunque a veces llegan a un punto en que los regaños y las nalgadas no están exentas.

"Siempre se tiene que tener una comunicación constante y clara; inculcarles valores es lo más importante y estos tienen que aprenderlos cuando nos vean a nosotros hacerlos como papás, otra clave es que siempre se les infunda confianza y sepan que a pesar de las travesuras tienen nuestro apoyo", dijo.

Motivar a los hijos a que participen en actividades artísticas como el canto, dijo, los obliga a comprometerse con los papás y a responder con buenos actos.

Valeria Monroy comentó que en su caso el método más efectivo es negarle a su...

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