Es hora de comer
| Autor | Rocío Hernández |
Para este Día del Niño no hay que olvidar que los pequeñines necesitan aprender a comer bien, ya que la alimentación es un factor importante para el sano desarrollo, además de mantener en óptimas condiciones al organismo.
Es necesario darle mayor importancia a la dieta diaria de los infantes, para evitar a toda costa ciertos padecimientos como anemias, falta o exceso de peso, y hasta la diabetes, señala Ivonne Flores, nutrióloga del Instituto Deportivo de Cultura Física y Deporte.
La manera de alimentar a un niño varía dependiendo de la edad y características de su desarrollo, por lo que es conveniente consultar con el nutriólogo o con el pediatra los detalles y cuidados que se requieren para cada caso, recomienda la experta.
"Lo más importante en esta etapa es promover buenos hábitos nutricionales, ya en la adolescencia no se pueden modificar o difícilmente puede lograse, ya que son muchos años en los que se lleva un proceso de mal comer", dice la nutrióloga.
Es conveniente incrementar el consumo de guisados con verduras crudas o cocidas y mayor cantidad de frutas en lugar de dulces.
"Por supuesto que el dulce es necesario para los niños, por la cantidad de energía que gastan al jugar, estudiar, correr, saltar y demás, pero no se debe exceder en su consumo, ya que se puede promover un incremento de peso y grasa corporal.
"Lo más conveniente es que los niños ingieran el dulce en barritas de granola, o en alegrías de amaranto y frutas frescas en general, en coctel de frutas picadas y acompañadas de chilito y limón al igual que las verduras", indica la experta.
Otro punto importante, es nunca exigir a los niños comer de más. Existen periodos donde se incrementa el desarrollo, pero igualmente hay intervalos en los que el niño no crece y por lo tanto sus necesidades energéticas son menores.
"Si antes un niño se terminaba un plato completo y después deja de hacerlo, hay que dejarlos que no coman más y que sigan con sus actividades", comenta.
Del mismo modo, la experta recomienda que los niños hagan de 4 a 5 comidas al día, ya que su estómago es pequeño y requieren de bastante energía.
Además de las tres comidas diarias se recomienda tomar dos colaciones, que pueden consistir en una ensalada de atún, galletas de salvado y avena, jugos naturales o agua de frutas.
"No se aconseja tomar jugos industrializados por las cantidades excesivas de azúcar que contienen, también pueden producir exceso de peso.
"Tampoco es bueno que consuman complementos...
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