Es año apantallante
| Autor | Lorena Corpus |
La industria cinematográfica en Nuevo León reportó cifras dignas de presumirse, pues en el 2021 se filmaron nueve largometrajes de ficción que arrojaron una derrama económica estimada en unos 120 millones de pesos.
De acuerdo a cineastas regios, Monterrey vivió un gran año pese a la pandemia, incluso nunca se había visto que entre los realizadores se "pelearan" el equipo para poder realizar y concluir la producción de sus filmes.
Aunque es un estado industrial, señalaron que poco brilla en la lista nacional de las entidades que producen cine, pero esta vez la historia es otra.
"En 2019 Monterrey ocupó el lugar 19 a nivel nacional en producción, se filmaba más en estados como Nayarit que en Nuevo León", indicó Gabriel Guzmán, cineasta y Presidente del Cluster de Medios Creativos e Interactivos de Nuevo León.
"En el 2020 caímos en el lugar 21, todavía mucho peor; obviamente la pandemia ahí empezó a pegar, pero este año (2021) seguramente vamos a romper récord, porque no recuerdo un año en el que se hayan producido tantas películas, al menos en los últimos 15 años, se produjeron nueve largometrajes de ficción en el estado", añadió.
Títulos como Somos Invisibles, de Sinhueì Benavides; Un Mundo Mejor, de Janett Juárez; Amor y Matemáticas, de Claudia Sainte-Luce (de la Ciudad de México); Sountrack, de Humberto Garza, y El Norte Sobre el Vacío de Alejandra Márquez, filmada en Linares.
Además de Sombras, de Homero Bueno; La Alberca de los Nadie, de José Luis Solís, y Bendita Suegra, del director sinaloense Beto Gómez, que terminó filmación hace unos días en el municipio de Santiago.
El 2021 lo empezaron con el rodaje de Misión: Peligroso, de Marcela Recio en San Pedro y Monterrey.
"Se estima que es una derrama económica de unos 120 millones", señaló Guzmán, "porque hubo tres filmes de bajo presupuesto, pero de esas nueve, cuatro fueron de un presupuesto de alrededor de 20 millones".
Las producciones grandes generaron empleos directos a unas 200 personas, pero los cineastas indicaron que el 60 por ciento de lo que deja una película, se gasta en servicios que no necesariamente son de producción audiovisual, por ejemplo hoteles, restaurantes, transportación y gasolina, entre otros, esto hace que la derrama no impacte sólo a la industria, sino a todo el ecosistema.
"Nunca nos había pasado tener dos o hasta tres películas (produciéndose) al mismo tiempo y esa es una señal de lo bien que va la industria, de que hay interés por producir, que estamos...
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