Ernesto Sánchez Proal / Sapiens versus troglodytes

AutorErnesto Sánchez Proal

A Dani. Rompe el techo de vidrio.

Hace algunas semanas, durante la visita del Papa Francisco a las Filipinas, una niña de 12 años rescatada de vivir en la calle le preguntó: "¿por qué Dios permite estas cosas...?" Se refería a los abusos que ella, y otras niñas de la calle, ha sufrido -como drogas y prostitución-.

Según se reporta, Glyzelle no pudo terminar de leer su pregunta y rompió en llanto. El Papa la abrazó y después no pronunció el discurso que tenía preparado, sino que habló desde el corazón "ella hoy ha hecho la única pregunta que no tiene respuesta...".

Por otro lado, el martes pasado MURAL publicó que la ONU alerta de ataques a niñas por estudiar: "los ataques contra el acceso a la educación de las niñas se documentan con mayor regularidad".

La discriminación de las mujeres, incluyendo a niñas, es un rasgo cultural histórico que prevalece en mayor o menor grado en la mayoría de las culturas en el mundo. Hay incluso quienes afirman que la mujer es por naturaleza inferior al hombre. Analicemos más de cerca este punto, tomando como referencia a alguna otra especie sin una cultura compleja que pudiera alterar a su naturaleza original.

El mejor sujeto de estudio para esto sería el chimpancé (Pan troglodytes), nuestro pariente más cercano, con quien compartimos el 99 por ciento del código genético. Los chimpancés presentan rasgos muy parecidos a los humanos: forman tribus, son muy sociables, se apoyan entre sí e inclusive -como lo ha documentado el primatólogo Frans de Waal- generan conspiraciones y traiciones a sus líderes para derrocarlos.

¿Y qué hay de los roles del macho y la hembra? Los chimpancés machos tiene un claro rol superior al de la hembra: pelean para defender a la tribu y salen a cazar para obtener carne. Si encuentran a otra tribu, atacan, matan a los machos y a los bebés y secuestran a las hembras. El más fuerte es el macho alfa, con derecho sobre todas las hembras. Este es un fuerte argumento para los que promueven la superioridad masculina: al final es nuestra naturaleza, nos guste o no es contundente, ¿cierto? Falso.

El mismo De Waal reporta que la otra especie de chimpancés, el bonobo (Pan paniscus) tiene un comportamiento muy diferente: la sociedad es un matriarcado...

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