Ernesto Sánchez Proal / Hippies de traje

AutorErnesto Sánchez Proal

"Resulta que si uno no se apura a cambiar al mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno"

Mafalda.

En diciembre de 1983, mientras caminaba por la ciudad de Nueva York, un joven Steve Jobs pasó frente al edificio de IBM en Manhattan, se detuvo bajo el logo y le lanzó la reconocida señal con su dedo medio erguido y el resto de la mano empuñada, mientras sonreía y volteaba hacia la cámara para la memorable foto. La Macintosh se anunciaría el mes siguiente.

En los ochenta había un verdadero abismo cultural entre ambas empresas. En IBM, la cultura del noreste de Estados Unidos predominaba, claramente reflejado en la vestimenta requerida: traje oscuro y camisa blanca. ¿Barba? OK, mientras te crezca en tu tiempo libre. En Apple, la de la costa oeste: jeans, pelo largo, ¿corbata? Atavismo. Incluso en la planta de manufactura de IBM de México asistir sin corbata a trabajar era considerado un acto de rebeldía -este editorialista puede confirmarlo de primera mano.

Fast forward 30 años: hace algunos días Apple e IBM anunciaron con fanfarrias una alianza enfocada a cargar aplicaciones de negocios en las tabletas y teléfonos Apple, con el fin de incrementar sus ventas en el mundo corporativo. ¡Vaya movida! La otra ocasión en que IBM y Apple se aliaron fue en 1991, junto con Motorola, para tratar de frenar al binomio Microsoft-Intel ("Wintel"). En esa época, por cierto, Jobs estaba fuera de Apple.

Por supuesto, Dell y Blackberry se mostraron oficialmente poco impresionados con el anuncio (tenían que hacerlo), mientras Microsoft, con su reciente despido de 14% de sus trabajadores, no ha dicho mucho, además de confirmar su estrategia de "primero la nube, primero lo móvil".

Es un experimento interesante. El nicho de mercado inicial de Apple estaba centrado en usuarios con un perfil más parecido a un artista que a un ejecutivo, mientras que IBM tiene en su mismo nombre (y en su DNA) "máquinas para negocios internacionales". Del arcoiris original de la manzana al azul corporativo hay una distancia grande. Sin embargo, la realidad es que en cada vez más salas de juntas corporativas se ve a ejecutivos consultado su iPhone en lugar del Blackberry o realizando una presentación desde el...

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