Entrevista / Unen talento y danza
| Autor | AnalÃa Melgar |
Especial
Los coreógrafos mexicanos Marco Antonio Silva, Antonio Salinas y Magdalena Brezzo, crearon en conjunto dos piezas para el Ballet Provincial de San Luis Potosí, fundado en 1964 por Lila López y actualmente dirigido por Carmen Alvarado. Las piezas se presentaron el 10 de octubre en el Teatro de la Paz de San Luis, dentro del XXVII Festival Internacional de Danza Contemporánea. En esta ocasión, se vieron dos obras de Lila López, Cactus y Rebozos, seguidas de los dos peculiares estrenos: Estudio de la inmovilidad No. 1 y A fuego lento, coreodrama epistolar (15 provocaciones para 15 bailarines).
El evento provocó expectativa y preguntas: ¿cómo habrá de ser el retorno de Silva, actual Coordinador Nacional de Danza, al ruedo escénico?, ¿qué vínculos habrán establecido estos tres coreógrafos tan diversos entre sí?, ¿qué habrán hecho con un conjunto de bailarines amateurs y casi adolescentes?
Los estrenos, firmados por los tres, llevan en realidad la marca de Salinas y Brezzo, el primero; y de Silva, el segundo. Estudio... tiene escenas deshilvanadas, con la imaginación verborrágica de Salinas y con el dinamismo de Brezzo; A fuego... cuadros paralelos, claroscuros y un collage sin fin de músicas, sonidos, objetos, proyecciones. En todo caso, lo que más vale de este experimento es el cruce entre estos tres artistas valiosos, el contrapunto de sus pareceres, tres retratos de la danza contemporánea mexicana a comienzos del siglo 21.
¿Cómo evalúa este reciente proceso de trabajo?
Marco Antonio Silva: Este proceso más vale por el proceso que por el resultado.
Antonio Salinas: Un creador es un mundo, y encontrarme con otros dos mundos fue muy interesante y enriquecedor.
Magdalena Brezzo: Hubo mucho trabajo de mesa en el Distrito Federal, cada uno defendiendo el propio punto de vista.
¿Qué opina sobre la actual danza contemporánea mexicana?
MAS: Hay cierta reserva para lanzarnos a una mayor experimentación, a las sorpresas. Por querer figurar en la constelación de la danza nacional e internacional, nos permitimos poco habitar espacios nuevos, mentales y emocionales.
AS: En México, todo lo que no se parece a lo que dicta la academia no entra en el registro del público, de los críticos, de las curadurías. Si bien hay coreógrafos y grupos que experimentan en improvisación, danza-teatro, danza-video, aún no surgen lenguajes más genuinos.
MB: Ya no se venera tanto a los padres europeos y gringos. Pero seguimos valorando el formato de espectáculos de...
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