Entrevista / Pedro Kumamoto / 'No hablo de Oslo, hablo de Zapopan'
| Autor | Miguel De la Vega |
Foto: Roberto Antillón
Su optimismo no es cuestión de juventud sino de convicción en un proyecto que se gestó desde la sociedad civil, se catapultó en las redes sociales y se está convirtiendo en un fenómeno de la escena política en aquel estado, donde este año se renovarán las 39 diputaciones locales y las 125 alcaldías.
Sin nexos con algún partido o familiares en la política, compite en el distrito 10, de Zapopan, contra nueve candidatos postulados por partidos políticos.
Has ganado mucha notoriedad en este proceso, ¿quién te promueve?
Somos Susana (Ochoa, su coordinadora de prensa), el equipo, el iPad y las ganas de cambiar cómo se hace la democracia.
¿Por qué habría de creerte?
Porque no soy parte de un partido político, para empezar.
En apariencia, pues surges de una agrupación llamada Wikipolítica...
La diferencia es que cuando llegas a una boleta como candidato de un partido siempre le vas a deber algo a un grupo de poder, una tribu, un cacique.
En ese sentido, ¿todos los candidatos están descalificados?
No. Simplemente hay que saber que si le deben algo a quienes los pusieron en la boleta, eventualmente se los cobrarán.
¿Y tú a quién le debes tu candidatura?
No tengo un padrino político. Yo tengo 7 mil 200 madrinas y padrinos que me dieron la oportunidad de participar.
¿Haber logrado el registro es suficiente victoria?
Vamos por tres victorias. La primera fue el registro y la segunda va a ser ganar. Pero la tercera, que es a largo plazo, es articular el descontento hacia la esperanza de actuar en micro. Lo decía Eduardo Galeano: mucha gente pequeña en muchos lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo.
¿En qué consiste esa visión?
Creemos en el trabajo comunitario vecino a vecino, que se va tejiendo entre redes y que, poco a poco, exige a gobernantes, fiscaliza y observa las acciones; empuja agendas de tipo participativo.
¿Eso lo planteas para Noruega o para Dinamarca?
Para mi distrito, que ya demostró que sí quiere una candidatura independiente. No estoy hablando de un distrito en Oslo, sino que estoy hablando de Zapopan.
Unos podrían decir que es un planteamiento poco aterrizado en la realidad.
Los que tienen un planteamiento poco aterrizado en la realidad son los políticos que nunca caminan las calles, que no conocen de tú a tú cuáles son las percepciones que tienen de ellos los ciudadanos.
¿Tú sí?
Mi día consiste en un trabajo de 12 horas platicando acerca de las necesidades de nuestro distrito. Todos...
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