Entrevista / Mario Cardona / La voz de la experiencia

AutorEnrique León Candiani

Señor Futbol / Enviado

Irapuato.- Con 30 años de experiencia dentro del futbol, Mario Cardona vivió en carne propia el aspecto doloroso que provoca la ambición desmedida en este deporte.

Los acontecimientos que un grupo de 12 personas armadas provocaron en el Estadio Sergio León Chávez de Irapuato conmovieron al mundo del balompié en México, luego de que por la fuerza quisieron obligar a los dueños de la institución a vender la franquicia.

Sin importarles la imagen que pudieran mostrar al mundo entero y sin temor alguna a la autoridad municipal y federal, estos hombres decidieron salir de las instalaciones de estadio debido al repudio de la afición.

Para Cardona, presidente ejecutivo del Club Real Irapuato y hombre involucrado desde hace 30 años en el futbol, el momento que vivió fue uno de los acontecimientos más tristes y sorprendente que le haya tocado enfrentar.

En el plano administrativo estuvo en Leones Negros, Bachilleres, Nacional Tijuana y Tapatío.

-¿Qué te dicen todos estos conflictos que vivió el Irapuato antes de llegar a ser campeón?

En 30 años yo no había vivido eso que viví en casi 4 días, una experiencia que en verdad no debe de existir, como el ingreso al estadio de personas con pistola.

-¿En dónde nace este problema o mal entendido que genera un tipo de agresión?

Nace en unas charlas preliminares que hubo ante un grupo de personas de México y otra empresa de esta zona, donde en la conversación se enteran que son personas representantes de una tercera que no es la apropiada para el futbol, entonces se rompen esas charlas preliminares y ellos quieren tomar, como tomaron, las instalaciones de una forma violenta.

-¿Y por qué no venderle a ese grupo que en apariencia es un grupo solvente?

Tienes mucha razón, pero el futbol tiene que ser transparente y no puede ser la Final de un mismo dueño.

-¿Ellos, en su negociación, ocultaron esta situación?

Yo no entré en esas negociaciones; yo no me enteré sino hasta después, aunque creo que sí se ocultó y cuando se enteraron fue cuando se rompió todo.

-¿Recibiste amenazas?

No, no, definitivamente no, yo estuve todos los días aquí y definitivamente amenazas no recibí, yo veía a la gente armada, pero no había amenazas.

-¿Estos tipos robaron documentos, abrieron archiveros?

Yo tenía muchos activos económicos, documentos importantes y mobiliarios y no tocaron nada.

-¿Entonces estuvieron sentados y fumando?

Sí, aquí estaban ellos, eran tipo "comando" que...

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