Entrevista / Lydia Ko / Niña de oro
| Autor | Jessica Anguiano |
Conocer a Lydia Ko es recordar las bases del amor al deporte. La golfista, de apenas 18 años de edad, está en el LPGA Tour por la oportunidad de codearse con sus ídolos y dedicarse a practicar la disciplina que tanto le apasiona, más que por la fama o el dinero.
Sus brillantes resultados respaldan el que esté en la cima del ranking: cinco victorias en el año, incluida la de The Evian Championship, lo que la convirtió en la golfista más joven en ganar un torneo del Grand Slam.
Además, con su victoria en el Taiwan Championship, a fines de octubre, se volvió la jugadora más joven en sumar 10 títulos en el LPGA Tour.
La número uno del mundo, quien planeaba volver al Lorena Ochoa Invitational, pero canceló su participación, puede quedarse en 2015 con el premio a la Jugadora del Año, pero los conteos y las listas la tienen sin cuidado y, si quieren su consejo, Inbee Park debería ser la más galardonada esta temporada.
¿Qué escuchaste o sabías de Lorena Ochoa cuando eras una niña?
Una de las más grandes cosas que sabía era que ella tenía un driver de muy bajo ángulo. Yo soy de 9 grados, pero escuché que ella usaba 7, no he tenido oportunidad de preguntarle aún. Si es cierto, es asombroso, especialmente porque como mujeres no tenemos tanta velocidad en los bastones como los hombres.
Para que ella usara eso y tener tanto empuje es legendario, y ella es definitivamente una de las leyendas. Ella se retiró y estaba jugando genial en ese momento. Esa es una de mis metas. Cuando me retire quiero ser capaz de competir ahí afuera. Pienso que ella es un gran modelo a seguir y que tiene una gran familia.
Nueve Top 10 en tus últimos 10 torneos, incluyendo tres victorias, ¿cómo lo haces?
Ha sido una temporada asombrosa. Tuve mis primeras dos victorias temprano en la temporada y algunos Top 10 durante ese tiempo.
Después del Swinging Skirts (LPGA Classic de abril en San Francisco) no jugué muy bien por un mes y medio, pero regresé en el Wal Mart (NW Arkansas Championship en junio), y creo que eso me dio mucha confianza. Ese último día en el Wal Mart fui capaz de tirar un score bajo (63 golpes, 9 bajo par, acabó sexta).
Estaba pegándole muy cerca del hoyo y, cuando tuve oportunidades, las emboqué. Cuando las cosas salen de ese modo, terminas tirando un muy buen score. Tuve un score bajo en ese evento el año pasado y quedé segunda, entonces sí fue una buena semana en la que pude volver a tener ritmo y un momentum. Ese momentum es lo que sigue sucediendo.
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