Un ensayo en grande, para un debut 'gigante'
| Autor | Gabriel Garza |
La bodega donde ensayan, ubicada frente al Gimnasio Bronco Gym, en Apodaca, tiene muy pocas semejanzas al cuarto de vecindad que les prestaban para tocar en sus inicios como músicos.
En aquel tiempo, hace aproximadamente 20 años, los integrantes del entonces desconocido Bronco llegaban a ensayar a pie o de "ride", y el mayor reto era sacar la nueva "rola" de Ramón Ayala, de Los Humildes o de Los Bukis, y que interpretaban en quinceaños y bodas.
Hoy, el grupo, que por no ser dueño de la marca registrada del nombre ha cambiado por el de El Gigante de América, está de nuevo en un ensayo, "sacando brillo" a cerca de 40 canciones, la mayoría éxitos de su propiedad, para su regreso a los escenarios, luego de casi 5 años y medio de receso.
"Nosotros nos retiramos, entre comillas, todavía jóvenes del ambiente, todavía con mucho entusiasmo para seguir haciendo cosas. Tuvimos un receso, descanso y ahorita nos sentimos con mucha energía", dijo Lupe Esparza, quien junto a Ramiro, Aurelio, José Luis y Javier, actuarán hoy por la noche en Aguascalientes.
Más que un ambiente de nervios por el ensayo previo a su presentación masiva, en el lugar, decorado con paredes texturizadas, alfombra azul, luz blanca y cielo falso del mismo color, se respira camaradería, buena vibra y relajo entre los cinco alegres compadres.
Faltan tres días para el concierto y parece extraño pensar que estos muros se transformarán en miles de personas.
"¡Orale, gordo!", le dice sonriendo Lupe a Choche, antes de comenzar con la canción "Amigo Bronco".
En ellos ha habido cambios con el paso de los años. El celular se ha convertido en instrumento de primera necesidad. Ya nadie llega a pie, muchos menos a "ride", pues todos utilizan autos de reciente modelo.
"Ensayábamos sin micrófonos y con guitarras de madera en la vecindad del Chavo", platica Lupe en tono de broma. "Empezamos de ceros, con una mano adelante y una atrás, realmente sin nada y nuestro peregrinar casi duró cerca de 10 años de lucha.
"A nosotros no nos cayó todo de un día a otro, como a unos grupos, y como por causa de magia no perduran esos grupos. A los que nos cuesta, creo, logramos escribir historias importantes", comenta Lupe, quien en su camisa negra trae el logotipo de Bronco Gym.
La voz del cantante, que mueve los hombros de arriba abajo unas 20 veces por canción, se escucha en las dos bocinas JBL mucho mejor que antes, como si el tiempo la hubiera hecho madurar.
A diferencia de Lupe y Ramiro, quienes no...
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