Enrique Lendo / México en disyuntiva

AutorEnrique Lendo

El mismo día que el Ejecutivo envió al Congreso su iniciativa de reforma eléctrica, se presentó el inventario actualizado de gases de efecto invernadero (GEI) de México. La iniciativa de reforma eléctrica propone cancelar los incentivos que se habían otorgado al sector privado para la producción de energía renovable incluyendo los certificados de energía limpia y el autoabastecimiento. También reserva al Estado la explotación de litio, mineral muy utilizado en la producción de tecnologías limpias. Por su parte, el inventario actualizado GEI señala que, en 2019, la generación de energía eléctrica constituyó la principal fuente de emisiones de CO2e en México con 171 millones de toneladas.

De acuerdo con los hallazgos del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), la influencia humana en el calentamiento global es inequívoca y se debe a la elevada concentración de GEI que hemos depositado en la atmósfera por un uso creciente de energía fósil. Por ello, no es de extrañar que hoy el cambio climático se ubique como asunto prioritario de las agendas internacionales, no sólo política y técnica, sino también económica.

En los últimos años, hemos atestiguado muerte, devastación, migración masiva y elevadísimos costos económicos derivados de fenómenos climáticos. Entre 1970 y 2019, los impactos de fenómenos meteorológicos causaron 2 millones de muertes y $3.6 billones de dólares en pérdidas, según la ONU. En 2020, los impactos de huracanes y lluvias en México cobraron 116 vidas, 839 mil afectados y $26,580 millones de pesos en pérdidas según el Cenapred. Este año sorprendieron temperaturas por encima de 48°C en Siberia, norte de Canadá y Estados Unidos, e inundaciones nunca registradas en China, Alemania, Tula, Ecatepec y Tequisquiapan.

Sin embargo, el sentido de urgencia por atender las causas y efectos del cambio climático no es compartido por todos. Mientras que un número creciente de países le están apostando a la transición energética y se han comprometido a reducir sus emisiones GEI drásticamente en la presente década, otros se escudan en argumentos de soberanía energética, rectoría del Estado e impactos de la transición en su desarrollo. Otros más, como China, ven en las tecnologías limpias...

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