Enfrenta a franceses el velo islámico

AutorMónica Delgado

MURAL/Francia

PARÍS.- Después de meses de polémica, el regreso a clases de septiembre en Francia podría inaugurar una nueva ley que prohibirá a los alumnos portar en la escuela signos religiosos de manera "ostensible". La idea de esta ley que concierne de manera particular a las jóvenes de confesión musulmana que visten el llamado velo islámico, se apoya en la tradición laica francesa que estableció hace casi 100 años la ley de separación entre la Iglesia y el Estado.

"Para los franceses la escuela es un crisol común en donde no se deben mostrar las diferencias, representa ese lugar donde todos queremos mostrar lo que compartimos, lo que nos une y no lo que nos deferencia", explicó Jéróme Crozat, miembro de la UNSA-Education, sindicato del magisterio francés con una posición favorable a la ley.

Aunque cerca del 70 por ciento de los franceses aprueban la decisión presidencial, la perspectiva de esta ley ha dividido a muchos sectores de la sociedad francesa como los partidos políticos, la Iglesia católica e incluso el magisterio. Pero también ha despertado al militantismo islamista más radical y para sorpresa de muchos franceses, ha suscitado numerosas reacciones en el extranjero.

"No creemos que una ley va a solucionar todo como por encanto, pero hemos llegado al punto en que sólo una ley podrá evitar que se caiga en un problema más grave. Y sólo una ley permite que los maestros no estén sólos para resolver estos problemas", dijo Crozat.

De acuerdo con el militante de la UNSA-Education, sindicato de tendencia socialista, la opinión de los maestros ha evolucionado en los últimos 10 años y "todos aquellos que pensaban que los problemas del velo islámico se podían resolver por medio del diálogo y con un trabajo educativo son hoy partidarios de una ley", ya que en las escuelas persisten los problemas en torno al velo islámico.

Cada año, la Educación Nacional enfrenta 150 casos en el que una niña rehúsa quitarse el velo islámico para asistir a clases y aún cuando son casi 10 veces menos que en 1990, la posición de las niñas se radicaliza. "Los maestros se dieron cuenta que el velo no es una búsqueda espiritual personal, sino un compromiso político. Un acto de condicionamiento político", precisó Crozat.

"Es necesario una ley que recuerde cuáles son las reglas de vida de la sociedad francesa y que permita a maestros y directores de escuela contar con un marco legislativo para apoyar sus decisiones", consideró Crozat La tradición laica francesa que...

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