Enfrenta estigma de prisión

CIUDAD DE MÉXICO.- Maribel Vázquez recuerda la hora exacta en que puso un pie fuera del penal.

"Era la una de la mañana con dieciséis minutos. Yo estuve en Santa Martha cuatro años, dos meses, un día, una hora, 16 minutos. Y es cuando empiezo a ver la realidad de todo lo que me esperaba afuera", expresó.

Llegó al cuarto que rentaban sus hijos. Sólo había un colchón, pues lo que ganaban sólo alcanzaba para comer.

"Yo me sentí tan feliz, de verdad, agradecí llegar y no encontrar nada más piso y de que estuviéramos todos juntos", recordó Maribel.

No estuvieron mucho tiempo ahí. Un amigo les prestó una casa en Xochimilco, sin muebles y sin servicios.

Antes de salir del penal, dejó de ver a Alfredo, el padre de Said.

Pese a las ganas de salir adelante, pues quiere tener un local para vender artesanías, aún resiente el estigma social por haber estado en prisión.

"Me da pena. Hay gente que me conoce y me mira así como que 'eres la ex presa'. Me ven hasta como con la etiqueta ahí", dijo.

Además de un empleo, quiere iniciar un proceso para que resarzan el daño que le hicieron.

Reinserta, la...

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