Enfermedad del olvido

AutorIsrael Martínez

Sin causa aparente pero con grandes repercusiones, el Alzheimer es una enfermedad degenerativa e irreversible sin cura que ha llegado a afectar a más de 15 millones de personas en todo el mundo.

Este padecimiento que hace que la persona pierda la memoria, el conocimiento de su entorno y hasta tenga un retroceso en su vida, se calcula empieza a atacar a los 60 años, aunque existe la remota posibilidad de que se presente antes de esta edad, explicó el doctor Gabriel Neri Nani.

El especialista del Servicio de Neurología del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional, Siglo XXI, afirmó que aunque en México no se han determinado datos precisos de cuánta gente ha sido aquejada por esta enfermedad, se calcula que en base a estadísticas realizadas en Estados Unidos entre los 60 y 69 años hay cerca de 300 casos.

Sin embargo, conforme la edad va avanzando las cifras aumentan, ya que entre los 70 y 79 años se llegan a dar 3 mil 200 casos, cuando en personas mayores de 80, la suma da 10 mil 800 casos por año.

"Se estima que a nivel mundial, es más o menos la misma cantidad de incidencia; la incidencia calculada en menores de 60 años, es de 3 casos por cada 100 mil habitantes, arriba de 60 años, se reportan de 125 a 130 casos por cada 100 mil habitantes", afirmó.

Para el neurólogo, parte de las complicaciones que arrastra este padecimiento es el desgaste emocional en cada uno de los integrantes de la familia al ver cómo un ser querido, comienza a estar muy lejos de la realidad que lo rodea.

"Los cuidados que deben de dar los familiares al paciente suelen tornarse complejos, ya que van desde vestirlo, bañarlo, lavarle los dientes, cortarle las uñas, hasta cuidarlo completamente, sin poder dejarlo solo, por lo peligroso que resultaría", indicó el médico.

Descuidos graves, como dejar objetos en la estufa u horno, empiezan a ser parte de la etapa inicial del Alzheimer, ya que cuando se encuentra avanzada la enfermedad los incidentes pueden ser aún mayores, por lo que se requiere de la participación de toda la familia para sobrellevar el problema.

"La enfermedad en estadios finales, los vuelve completamente dependientes, confinados a una cama, por lo que deben moverlo para que no se descargue, no se infecte, como médicos, orientamos a los familiares, para hacer un diagnóstico temprano", aseguró.

Cuando ya es irremediable el mal, se presentan trastornos de memoria, posteriormente se pierde el autocuidado para vestirse, entre otras cosas, para ello...

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