Encuentros con México/ Rescatar un paraíso
| Autor | Ricardo Diazmuñoz y Maryell Ortiz de Zárate |
"El jardín es un espacio que se ofrece no sólo a un recorrido placentero, sino a una gozosa visión" Juan García Font
Los Mochis (Continúa)
Cerca de la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús se encuentra el Museo Regional del Valle de El Fuerte, alojado en la antigua casa del doctor Chapman (adaptada al finalizar la década de 1980). Las diversas salas albergan piezas prehispánicas encontradas en la región. El museo posee un importante acervo histórico sobre los orígenes de la ciudad y presenta, a través de fotografías y objetos de uso cotidiano, una progresiva mezcla de las tradiciones y grupos sociales que actualmente forman el Valle de El Fuerte. Cuenta, además, con un generoso espacio dedicado a exposiciones temporales. En un rincón especial se encuentra una enorme fotografía de Felipe Bachomo, el indígena mayo que para unos fue héroe revolucionario, pero para otros, un bandolero.
El pueblo, que había bautizado a Bachomo como el Cristo Negro (tenía 33 años cuando murió) y que le atribuía numerosos milagros, depositaba todos los días piedras y encendía velas en el lugar donde fue fusilado el 24 de octubre de 1916. El cerro de piedras no dejó de crecer hasta que se exhumaron los restos del general villista el 13 de octubre de 1922. Hasta la fecha, Bachomo es un símbolo en el corazón del pueblo.
Del museo conviene dirigirse al Parque Sinaloa y Jardín Botánico, refugio de 52 diferentes especies de aves, según un estudio del ornitólogo Fabio Germán Copeel. El ámbito fue propiedad de la familia Johnston, que mandó traer de varias partes del mundo y de México diversas especies vegetales para ornamentar el jardín privado de la Casa Grande (1913), su lugar de residencia. Para el diseño del jardín contrataron a la más famosa arquitecta paisajista de la época, Florence Yoch, pionera de los jardines en California.
Florence se inspiró en el jardín Alá Biskra, de Argelia, dividiendo el área en cuatro grandes secciones. Del centro de la cruz parten diagonales hacia diferentes rumbos. Al ingresar al Parque Sinaloa nos recibe una ancha calzada flanqueada de palmeras muy enhiestas y altísimas. Lamentablemente está muy deteriorado en la actualidad.
El espacio, de 16 hectáreas, llegó a ser el segundo jardín botánico con gran diversidad de palmaceas en el mundo: más de 90 especies. Las variedades de palmas están organizadas en secciones según su tipo y lugar de origen.
Incomoda que este jardín, considerado en su tiempo como uno de los más impresionantes de...
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