Encuentros con México / Un deporte nacional
| Autor | Ricardo Diazmuñoz y Maryell Ortiz de Zárate |
Cuando llegues a Lagos de Moreno, en Jalisco, te sugerimos que después de recorrer la ciudad visites a don Sabino González de Anda, un hombre de 84 años, recio, delgado y de buen talante, quien se dedica desde los 18 años a la fabricación de fustes, es decir, al alma de la silla de montar.
Te recibirá en su taller con agrado, te ofrecerá un refresco o agua, sobre todo si vas entre abril y mediados de septiembre, cuando el calor arrecia en la región de Los Altos. En la habitación se distribuyen, sobre mesas de trabajo y mobiliario, fustes de diversos tamaños, unos ya terminados, otros en proceso de elaboración. La luz que se escurre a través de la puerta abierta de par en par te permitirá conocer paulatinamente el ámbito donde trabaja y duerme don Sabino, reconocido a nivel nacional e internacional como el mejor hacedor de fustes de toda la República Mexicana.
Muchos políticos, entre ellos los Presidentes Carlos Salinas de Gortari (no hay que olvidar que doña Cecilia era de Lagos de Moreno) y Vicente Fox han adquirido sus fustes y le han solicitado otros.
Mientras nos muestra orgulloso una fotografía en la que aparece con el Mandatario en turno comenta: "A Jongitud Barrios, gobernador de San Luis Potosí, le hice tres, uno para el Papa Juan Pablo II, otro para Ronald Reagan, cuando era Presidente de Estados Unidos, y uno más para Genaro Borrego Estrada, que fue gobernador de Zacatecas".
Asimismo, varios artistas acuden a la maestría de don Sabino, pues un fuste perfecto no lastima al caballo ni al jinete. Vicente Fernández le ha comprado más de 40 piezas; los Pedrero de Tabasco, lo mismo, más de 40; Antonio Aguilar una cantidad similar, y casi todos los charros del País, en particular los de Unión de San Antonio, distante a unos cuantos kilómetros de Lagos de Moreno, poseen tres o más monturas con fustes de este viejo artesano que valora su arte con amor.
"Cada fuste es único; para mí es muy importante conversar con el cliente antes de hacerlo, así ajusto la cabeza o la cola según sus necesidades, jinete y caballo tienen que sentirse cómodos".
Antes de mostrarte su trabajo, te señalará las maderas: de naranjo, para las incrustaciones; de cedro, caoba y otras maderas, para la estructura de la silla de montar que posteriormente será ajuareada en el taller de los hermanos Esparza...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba