Encuentre en Veracruz al doble de Nemo
| Autor | Carla Guerrero |
Fotos: Salomón Ramírez
MURAL / Enviados
VERACRUZ, Ver.- Visitar el puerto de Veracruz exige la visita a su acuario, el más grande de Latinoamérica y con ejemplares únicos en exhibición, como una tintorera o tiburón tigre, manatíes y un pez payaso que bien podría ser el doble de Nemo, el personaje de la película animada de Pixar.
Inaugurado en 1992, inició primero como un museo de exhibición de la flora y la fauna marina para después involucrarse en el ámbito de la educación e investigación.
En la actualidad, el acuario posee una de las colecciones más completas de organismos acuáticos con más de 200 especies y 13 mil ejemplares, distribuidos en tres salas: la galería de agua dulce, la de agua salada y la gran pecera oceánica, además del tiburonario, la zona interactiva, el manatiario y el estanque de contacto.
Es el octavo acuario más visitado del mundo: recibe a 13 mil personas diarias que eligen entre visitas guiadas o perderse por su cuenta entre las peceras y burbujas de agua que conforman el recinto.
Para la selección y captura de las distintas especies se tuvo que cumplir con una serie de requisitos ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, así como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, quienes otorgaron los permisos para que el acuario fuera puesto en funcionamiento.
El recorrido inicia con la Senda Ecológica, que reproduce el ecosistema de la reserva de los Tuxtlas, con ejemplares como tucanes, boas, tortugas y lagartos. Después está la galería de agua dulce formada por nueve contenedores con 40 diferentes especies entre pejelagartos, anguilas eléctricas, cocodrilos y nutrias.
Destacan las pirañas pacú, diferentes a las amazónicas porque se alimentan de fruta; el pez avapaima, el más grande del mundo (de hasta 360 centímetros), y el pez ciego (sin ojos y originario de lagos subterráneos).
En grandes tubos de agua nadan peces ángel, caballitos de mar y el pez payaso, la misma especie que Nemo, el famoso personaje animado. Los niños son los más emocionados con este pecesito que nada en medio de plantas acuáticas mientras recriminan a sus papás por haberles dicho que Nemo no existía.
La siguiente galería es una construcción circular con 4.5 metros de profundidad: la pecera oceánica más grande de Latinoamérica. Sus 13 paredes de acrílico de 22 centímetros de espesor soportan la presión de un millón 250 mil litros de agua del Golfo de México.
Ahí nadan tortugas carey en peligro de extinción (pues su...
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