Encuentra el 'Terrible' motivación en su bebé

ERIK MORALES asegura que tiene una motivación muy especial en esta ocasión. Y no se trata de una bolsa millonaria, o de las regalías del Pago Por Evento, sino el impulso de saberse padre de Erik Isaac II, quien nació hace siete meses.

El no poder jugar con el pequeño, por estar entrenando en las montañas del Centro Ceremonial Otomí, lo ha tenido que asimilar el púgil tijuanense rumbo a su tercera cita, la del desempate, con el filipino Manny Pacquiao, el 18 de noviembre en Las Vegas, Nevada.

"Sí está muy lindo mi bebé, muy grande, gracias", es la primera expresión de Morales (48- 4, 34 KO's).

Si bien al tres veces campeón del mundo en distintos pesos le duele estar lejos del niño y de su esposa Andrea, eso lo ha valorado Morales y con ello apuntala su objetivo de salir con la victoria ante Pacquiao (42-3-2, 33 KO's).

"Lo extraño mucho (a mi hijo), pero pues esto es parte de mi trabajo" comentó el boxeador mexicano. "Estoy muy feliz a lado de mi familia, feliz, y ya falta poco (para la pelea)".

Morales se encuentra concentrado...

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