Sus encantos lo derretirán

AutorAreli Ávila

Sinónimo de relajamiento y pacificación, el té es la alternativa saludable a los refrescos y otras bebidas que hidratan y mantienen alerta, pues al beberlo frío se consumen cero calorías.

Los antioxidantes, vitaminas, minerales y múltiples propiedades preventivas del té, como las del cáncer de mama, de próstata y del aparato digestivo, no las tienen todas las infusiones que en México se designan erróneamente con ese nombre.

"El té es sólo la bebida elaborada a partir de la planta Camellia sinensis, todo lo que es manzanilla, hierbabuena, frutas, flores, cáscaras o semillas son infusiones y tisanas, no tés", explica la tea master Claudia Zárate, miembro de la Asociación Mexicana de Sommeliers.

Al recolectar las valiosas hojas de la planta de origen chino, con referencias que datan del Siglo 3 antes de Cristo, éstas entran en contacto con el oxígeno e inician un proceso natural de oxidación que las oscurece, como sucede con la manzana. Así surgen distintos tipos de tés (blanco, verde, negro), que se suman a las mezclas, los saborizados y los aromáticos, los cuales tienen cuando menos un 80 por ciento de hojas de té y el resto de otros ingredientes.

"El té negro tiene (teína) dos veces menos estimulante que el café (cafeína) y el verde, seis veces menos, que sumado a otras sustancias estimulan y relajan al mismo tiempo sin alterar los nervios", comenta Olivia Medina, directora general de Euro Té en la Ciudad de México.

El famoso ice tea de Estados Unidos y Canadá se logra de la forma tradicional (calentando agua y antes de que hierva añadiendo hojas o sobrecitos de té, reposándolo y colándolo) para verterlo en un vaso con hielos.

"También puedes hacer el té helado con agua fría, que casi nadie lo hace: pones las hojas o sobres en una jarra con agua fresca y lo dejas toda la noche en la cocina; al otro día lo cuelas y queda un concentrado que sirves con hielos y te rinde el doble", dice Medina.

Colorimetría por descubrir

Identificados más fácilmente por su color, existen tipos básicos de té que varían de aroma y sabor de acuerdo a su grado de oxidación. De estos se derivan más de 3 mil variedades de mezclas. Pruébelos:

Blanco

· Hecho con brotes nuevos y hojas jóvenes de la planta Camellia sinensis cubiertos de una vellosidad blanca, los cuales se dejan secar para conservar sus propiedades. Contiene más catequinas (polifenoles) que otros tés y menos teína (estimulante similar a la cafeína) que otros. La mezcla Yin Zhen es de los tés más caros...

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