Encanto de primavera

Se dice que con la primavera surge el verdadero agasajo en cuanto a frutas y verduras frescas se refiere porque a diferencia de otras latitudes, donde las temporadas limitan la oferta, en México están disponibles prácticamente todo el año.

Sin embargo, chefs como Héctor Zavala y César Reynoso coinciden en que hay estaciones en las que la naturaleza hace de las suyas y logra productos de mayor calidad que se venden a menor precio por estar de temporada.

Así, con el arribo de la estación, y hasta mayo, en los campos y huertos reinarán excelentes verduras de hoja verde y frutas tropicales como el melón, la sandía y la piña, que poco a poco colorearán los mercados.

El melón gota de miel o verde, por ejemplo, no es tan popular como sus parientes cantaloupe y valenciano, pero ofrece un sabor dulzón muy particular que se aprecia mejor en un refrescante granizado o como acompañamiento del jamón serrano y el prosciutto en charolas como entrada.

Las semillas también sirven para elaborar un agua fresca "horchata de melón" licuándolas con medio litro de agua y azúcar al gusto, para después colarlas sobre litro y medio de agua.

Con este verdoso melón la instructora de cocina Lupita de Méndez confecciona un gazpacho blanco licuando la pulpa con jugo de limón, miel de abeja, pepino, especias y hielo.

En su apogeo también están las lechugas en todas sus variedades, desde las clásicas romana y orejona hasta las incluidas en las mezclas italianas: sangría, rizada, francesa, italiana, escarola, arúgula, entre otras.

Aparte de que pintan las ensaladas, se pueden utilizar como tortillas para tacos, agregarlas en estofados, sopas o caldos de pollo, hacer aguas frescas y decorar los platillos.

Otros regalos de la primavera son las frutas tropicales como la piña y el mango, cuyo aprovechamiento en los menús rebasan al coctel de frutas, la ensalada fresca y al antojo o al postre.

"Con la piña se hace una deliciosa salsa agridulce", sugiere la instructora de cocina Maritza de Camarena, "se carameliza el azúcar, se le agrega la pulpa de una piña, dos chiles de árbol, un cuarto de taza de vinagre blanco y dos tazas de agua. Se hierve hasta que la piña esté suave, se licua, se cuela y se sirve".

Por otro lado, el mango petacón "paraíso", de sabor agridulce...

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