Empatan marketing e ideología de Frida
| Autor | Laura Castellanos |
"Es el mejor negocio de mi vida", reconoce Carlos Dorado, empresario de moda venezolano que posee el 51 por ciento de las acciones de Frida Kahlo Corporation y quien no encuentra ninguna contradicción entre el lucro a costa de la pintora y el ideario que enarboló ésta.
Incluso, dice, ella no sería comunista hoy, sino una persona de "izquierda democrática pragmática".
A un año y dos meses de vida, la compañía que tiene los derechos sobre la imagen de la artista, la firma y su nombre, ha lanzado un corsé en Europa, un tequila en Estados Unidos y una muñeca de colección en siete países.
Y ya alista una marca de ropa, una línea de jarrones de talavera, y planea otra de blancos y artículos para el hogar. Se estudia también crear un grupo musical: Las hijas de Frida, con Televisa Emi Music.
El distribuidor de Armani y Versace para América Latina rechaza que el fin sea meramente lucrativo, anuncia que están por crear la Fundación Frida Kahlo para atender dos o tres orfanatos y asilos en México. "En la medida en que la Frida Kahlo Corporation funcione, la fundación va a tener más recursos", sostiene.
La empresa se constituyó porque Dorado se asoció con Isolda Pinedo Kahlo, sobrina de la pintora, a quien la Ley de Propiedad Industrial le reconoce el derecho sobre la firma, imagen y nombre de la artista plástica, mientras el Fideicomiso Museos Diego Rivera y Frida Kahlo tiene los derechos de su obra pictórica, asegura el abogado José Hinojosa.
¿Cómo un venezolano tiene la mayoría de las acciones de la Frida Kahlo Corporación y esto qué significa?
"Significa que él tiene el control, pero la misma asociación establece candados, de manera que él no puede disponer ni hacer nada sin la autorización de la familia", afirma Hinojosa.
Mara Romeo, hija de Isolda, es la directora del corporativo -integrado por tres personas en México y dos en Miami- y asegura que la sociedad con Dorado surgió porque él posee el "know how" (el conocimiento), aunque ella tiene la última palabra.
"Tiene el poder de decisión de cuánto invertimos, pero en cuanto a la imagen, si existe un producto y yo digo que no, es no", advierte.
Romeo desestima las críticas de que la corporación sea mercantilista.
"Muchísima gente ha comercializado con Frida, y nosotros lo que queremos es tener un control de lo que se haga", responde.
Según Dorado, lo relevante para él no es tener la mayoría de las acciones del corporativo, sino cumplir su reto de dar a conocer a Frida en las élites cosmopolitas...
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