Embrujados... por el amor
| Autor | Leticia C. RenterÃa |
ENVIADA
LONDRES.- Lord Voldemort y sus Mortífagos siembran el terror en el mundo mágico, e incluso entre los muggles ya hay víctimas de su maldad. Sin embargo, los alumnos de Hogwarts parecen mucho más interesados en cómo lidiar con un hechizo sumamente poderoso: el del amor.
Así, no es de sorprenderse que en Harry Potter y El Misterio del Príncipe, sexta entrega de la saga que se estrena en México la medianoche de hoy, abunden las escenas de coqueteo, besos y celos entre adolescentes.
"Fue mucho más padre regresar a filmar esta entrega, porque sabíamos que era más una comedia romántica. El filme es bastante oscuro, pero también te deja ver este lado más ligero. Tratamos de hacer esta película lo más divertida que pudimos", afirma Emma Watson, quien da vida a Hermione Granger.
En efecto, la premisa central de la obra de J.K. Rowling no es precisamente alegre: Harry tiene la misión de hurgar en los recuerdos del profesor Horace Slughorn para descubrir la manera de destruir a Voldemort... y ponerlo en práctica.
"En términos narrativos, eso es fundamental para el desarrollo de la saga. Pero me parece que es aun más importante el que los protagonistas son ahora mayores", explica el director David Yates. "Las hormonas están a todo lo que dan, así que era imperativo evidenciar esa transición de niños a adultos".
De ese modo, ahora Hermione ya está tan preocupada por sus calificaciones como por el hecho de que Lavender Brown (Jessie Cave) haya puesto los ojos en Ron (Rupert Grint). Y a Harry también le parece más llevadera su misión de salvar al mundo mágico cuando está cerca de Ginny (Bonnie Wright).
"La experiencia de estas escenas fue muy diferente a las que hice con Cho (Katie Leung) en La Orden del Fénix, porque, bueno, ella llegó expresamente para interpretar al interés amoroso de Harry. Pero con Bonnie he trabajado desde que tenía 11 años, así que fue medio raro", comparte Daniel Radcliffe.
El romance en el mundo mágico, sin embargo, tiene sus particularidades. Por ejemplo, a veces se puede echar mano de un Filtro del Amor o de la poción Felix Felicis, que concede buena suerte al que la bebe (claro que, en ambos casos, los efectos no son duraderos).
Y el encargado de enseñar estas recetas a los chicos es el Profesor Slughorn, el nuevo miembro de la plantilla académica de Hogwarts.
"Es una experiencia única unirme al mundo Potter. Todo está ya establecido, hay actores maravillosos, amigos que han trabajado juntos por seis años. Y, bueno...
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