Educan guarderías a padres de familia

AutorAlejandra Reyes

Luego de saludar al policía que cuida la puerta de doble seguridad y de mostrar su identificación, Diana de Alba, madre derechohabiente, entra a la recepción de la Guardería 25 del IMSS, en la Colonia General Anaya, y sube a dejar a su bebé, que luce impecable, porque ella sabe que si tiene una manchita en el babero recibirá una llamada de atención o simplemente no será recibido.

Llevar al niño limpio, con vacunas al día, en perfecto estado de salud, uñas recortadas, accesorios de acuerdo a su edad, seis pañales y tres cambios de ropa, son sólo algunos de los requisitos para que el pequeño ingrese de lunes a viernes al centro infantil.

Cuando Diana se despide de su hijo, una puericultora del área de lactantes le informa cómo se portó el el día anterior. Al recogerlo por la tarde recibirá un informe escrito de su comportamiento del día de hoy.

"Estas medidas en un principio parecen ser difíciles para nosotros los papás porque tenemos que acatar ciertas normas, como llevar una revisión de la cartilla de vacunación, el peso, higiene del bebé, y eso es bueno, pues no se nace siendo padre, y en la guardería no sólo aprenden nuestros hijos, también uno adquiere reglas que son de gran ayuda", dice De Alba.

"Además me quedo con la tranquilidad de que cualquier signo de enfermedad o descuido en el niño, inmediatamente me lo harán saber y lo anotan en una libreta de control, igual que sus logros de cada día", agrega.

En un recorrido realizado por REFORMA al interior del plantel, se pudo comprobar que ponen especial atención en la higiene: los uniformes del personal están impecables, lo mismo que las periqueras, los colchones, el piso y cuanto material didáctico que se les proporciona.

Un recorrido por su mundo

Antes de desayunar, una canción se oye en el área del comedor, los pequeños son estimulados con música por las puericultoras y educadoras:

"Dos ojitos tengo que saben mirar, una naricita para respirar, y una boquita que sabe cantar".

La guardería, con capacidad para 256 niños, organiza grupos de entre 24 y 36 menores, de acuerdo con Alma Aurora Díaz Roa, directora del lugar.

El grupo de lactantes A está compuesto por bebés de entre 45 días y 6 meses. El B comprende edades de 7 a 10 meses.

Los lactantes C tienen entre 10 y 12 meses y, aunque parecen muy pequeños, comen por sí solos, demuestran seguridad en su andar y hasta luchan por lavarse sus primeros dientes.

Los del área de maternal tienen desde un año y medio hasta cuatro.

"En cuanto a la...

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