Editorial
| Páginas | 1-1 |
1
EDITORIAL
Las vicisitudes que han enfrentado en México las parteras, “guardianas de la vida” —como se les re-
conoce en los pueblos originarios—, a lo largo de la historia, han propiciado que su labor haya sido
menospreciada sistemáticamente, en especial como consecuencia del proceso de
medicalización
del parto, esto es, de convertir una situación que siempre ha sido normal en un cuadro patológico
que pretende resolverse mediante la medicina —por ejemplo, mediante cesáreas innecesarias—
no obstante que esa situación no es estrictamente médica sino social.
Progresivamente, las parteras fueron relegadas a un segundo término, lo mismo que todo el bagaje
cultural en el que sustentaban su práctica tradicional: su dominio de la herbolaria y su conocimiento
del cuerpo de la mujer y sus ciclos, y terminaron siendo auxiliares secundarias en el parto y el pauperio,
como enfermeras obstetras, en general con la supervisión de un experto en biomédica.
No obstante ese panorama, en la actualidad asistimos a la revalorización de esas tradicionales guardia-
nas de la vida, pues ha resurgido una rica gama de parteras: enfermeras obstetras y perinatales, parteras
técnicas y médicas parteras, por una parte, y parteras urbanas y rurales, por otra, todas con la capacidad
suciente para atender embarazos de bajo riesgo, en muchos casos erradicando las intervenciones mé-
dicas a lo estrictamente necesario y suprimiendo protocolos hospitalarios que se han vuelto rutinarios
pero onerosos, como la práctica de la episiotomía y la aplicación
de oxitocina sintética para apresurar el parto.
Aunado a lo anterior, en el contexto internacional,
los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 en
materia de salud materna propician la reinser-
ción de este tipo de mujeres para alcanzar
sus propósitos a mediano plazo, y en el ám-
bito nacional el Estado mexicano promueve
un proyecto de ley que tiene la nalidad de
incorporar a las parteras tradicionales a la
red de servicios y atención hospitalaria.
Asistamos con mente abierta al retorno
de estas guardianas de la vida.
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba