Dudan los colombianos de la desmovilización
| Autor | Octavio Pineda |
REFORMA/ Colombia
MEDELLÍN.- Ante la reciente desmovilización de más de 850 integrantes del Bloque Cacique Nutibara (BCN) de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), los habitantes de las deprimidas comunas de Medellín donde el bloque hace presencia tienen más preguntas que respuestas.
"Ni son todos los hombres que se deberían desmovilizar ni todas las armas que deberían entregar. El Cacique Nutibara sigue ejerciendo presencia porque no se han desmovilizado todos", aseguró en entrevista un líder comunitario del barrio Villa de Guadalupe, que hace parte de la llamada comuna nororiental de Medellín.
"De este barrio fueron a la ceremonia de desmovilización unos 85 chicos, del barrio vecino fueron 80, de Granizal unos 70, pero no bajaron todos los que son, incluidos algunos subcomandantes que todavía están por acá. Y las armas que entregaron tampoco son las que utilizan permanentemente", abundó el líder comunitario.
En barrios de otras comunas los testimonios son similares. "Aún hay de esa gente por aquí. Faltan varias bandas que trabajan para ellos por entregarse", afirmó un residente del barrio La Sierra, en el centro oriente de la capital antioqueña, segunda ciudad de Colombia.
Los habitantes de las comunas, barrios marginales ubicados en las laderas de las montañas que circundan a Medellín, admiten que a partir de la firma del acuerdo de Santa Fe de Ralito en julio pasado, por el cual las AUC se comprometieron con el Gobierno a desmovilizar sus 13 mil combatientes, los homicidios en las zonas de influencia paramilitar se redujeron como parte de una campaña preparatoria de convivencia pacífica, pero lo que sucederá en adelante no es claro.
"No se sabe qué va a pasar en los próximos días. No se ha consultado ni a la comunidad ni a las víctimas ni a la sociedad civil. Ha sido una relación directa entre quienes se desmovilicen y el Gobierno nacional", advierte el líder comunitario de Villa de Guadalupe.
"No se nos ha preparado para el proceso y no tenemos claridad sobre sus alcances. Actuamos a las ciegas de lo que está pasando, que creo le pasa también al Gobierno, que no sabe hasta dónde va a llegar el proceso", agrega.
Los temores de los habitantes de las comunas son producto de experiencias de desmovilización anteriores, en las que los desmovilizados se volvieron blanco fácil de grupos armados rivales.
"Nos preocupa que los chicos del Cacique Nutibara se vuelvan víctimas de la violencia apenas regresen a su comunidad, ya sea...
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