Dorar la píldora

¿Quién es Lucia Berlin?Mónica Lavín

EL UNIVERSALUna amiga me dijo: ?Si te gustan los cuentos de Carver te gustará Lucia Berlin?. No había escuchado hablar de ella. En cuanto pude me compré uno de sus libros en inglés, el idioma original, una edición reciente de quién, luego sabría, se ha vuelto autora de culto a más de 10 años de su muerte y se le puede encontrar en traducciones. No me gusta empezar por leer prólogos y antesalas, quise entrar en el cuerpo de sus ficciones sin andadera. Como una lectora desprevenida. Tenía razón mi amiga, Lucia Berlin me ha deslumbrado. Tal vez esa no sea la palabra. Me ha raspado. Su voz y su mirada son compañía que aceitan mi asombro. Algunos de sus cuentos son ya piezas memorables conforme recorro la selección de cuentos de A Manual for Cleaning Women. Recupero la sensación de descubrimiento, de pisar tierra por primera vez en un mundo de palabras que hago mío. La niña expulsada del internado por un gesto de violencia mal colocada, la adolescente cuyo abuelo dentista la obliga a sacarle todos los dientes para estrenar esa dentadura postiza en la que él es experto, la maravilla de miradas que intercambian el indio y la protagonista en una lavandería. Los ambientes, las palabras justas, la emoción delatada por acciones, la sinceridad de los personajes, las fragilidades que nos hermanan, el cable desnudo de lo que somos (como la afanadora que viaja en autobús y entre parada y parada hace el recuento de sus experiencias limpiando casas de personajes que extraña, mujeres viejas y solas, que así como la contratan la despachan), la mezcla con el español, el oído fino, poético, musical como el marido jazzista, uno de varios, todos ocupados en el arte (Lucia no era una mujer convencional, como lo delatan sus cuentos y sus maridos).

Lucia Berlin empezó a publicar en los años 60, cuento, primero en revistas, luego en editoriales pequeñas, pocos ejemplares vendidos. Las fotos revelan a una mujer muy guapa. Nació en Alaska en 1936, murió en Los Ángeles en 2004, a los 68 años, bajo el cuidado de uno de sus hijos, tuvo cuatro y prácticamente los mantuvo ella con un sinnúmero de empleos: afanadora, enfermera, recepcionista, hasta que tuvo una plaza de profesora invitada en la Universidad de Colorado. Justo cuando su vida, con problemas de alcoholismo, se nivelaba, el cáncer en los pulmones la cortó de tajo. Mucho de su experiencia personal, con una infancia...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR