Domingrillo

AutorMarco Antonio Flota

El temblor fue de 6.3 grados en la escala de Richter, no de Margaritcher:

ya superamos el síndrome Fox.

Algunos ni lo sintieron: en la Cofetel pensaron que era el Secretario de Comunicaciones, T. Yes, moviéndoles el piso. O la Maistra agitándole el tapete, creyó Chepina Vázquez Mota. Sí hubo un derrumbe: en el sindicato minero cayó Elías Morales y resucitó el que se cree Napoleón, o sea su papá, pero es Napito. Alguien del Gobierno filtró que la culpa es de Fox, pero lo defendió el PAN: Javier si no cortan por Lozano, dicen en la Secretaria del Trabajo. No fue tan fuerte: en el 57 se cayó el Ángel, en 85 se cayó Tlatelolco, está vez no ha caído ni el asesino de Amado Ramírez, el compañero que ya tuvo en el mar su última morada, mientras donde Medina Mora dan palos de ciego.

"¡Peje Infante!" no ha muerto,

clamó María Rojo en el Senado.

Y es lo único rojo, María, que le queda al PRD, pero se equivocó: el Torito sí fue inocente. Se solidarizó con "Nosotros los pobres", pero no le echó la culpa de su tragedia a "Ustedes los ricos". Excepto, claro, el compañero Slim, que ya es el segundo potentado del mundo y, él sí, Presidente Legítimo de México y otros países. También llegó Pedrito a la Cámara de Diputados, a sus 50 años de muerto: como algunos líderes obreros. Le pusieron una exposición fotográfica, pero no inscribieron en oro la letra de "Amorcito corazón": eso quizá fue en Los Pinos el sexenio pasado. Cuando construyó su rincón -cabañita- cerca del cielo, una chorreada traía volando más bajo que Pedro al que llegó del rancho a la capital: un señor que no lloró como López Portillo o como Perro... digo: Pedro, sobre la tumba de Sara García. Pero es que Infante sí tuvo abuela.

Recibió Mouriño en Campeche a sus colegas de Centroamérica.

Ah: también fue Calderón.

Fue diseñada para contrarrestar a Chávez la cumbre del PPP, pero Hugo sólo contestó: "¡Jejejé!". Más elocuente estuvo cuando le replicó a Fox: "¡Alca... Alca... al carajo!", acompañado por Maradona, quien actualmente padece los efectos de otra embriaguez, no la de...

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