Fricasé/ Doble estándar
| Autor | El Abogado del Pueblo |
La semana pasada, platicando con un amigo muy admirado y querido, gente inteligente él, nos decía que sus amigos capitalinos a cada rato le preguntaban: "¿Qué está pasando en Nuevo León?
En apariencia, refiriéndose con esa interrogante a una especie de cataclismo económico que ha descendido sobre las antes prósperas empresas locales, ejemplo para todo México.
Y así, en este sentido, lo tomó él: en el sentido estrictamente económico.
Este su abogadete, más menso que un burro ejidatario, lo interpreta de manera diferente: la "bancarrota" de la iniciativa privada regiomontana no es económica: es moral y ha conducido al desfiladero económico a algunos grupos locales.
Por ello utilizamos el término "en apariencia" porque el "Auge y la Caída del Imperio Regio" no es una historia basada exclusivamente en el mermado desempeño económico de algunas de sus empresas grandotas.
Es para nosotros muy claro que el declive económico que estamos viviendo, en realidad, se gesta en el momento mismo en que, habiendo un cambio generacional de liderazgo empresarial en la entidad, los nuevos símbolos del empresariado mexicano abandonan la defensa de los ideales para abordar la defensa de sus intereses.
Ni siquiera comunitarios o gremiales éstos, que haría la falta menos grave, sino más bien de corte personal.
Sinónimo con esta búsqueda del interés personal fueron los cambios de actitud y de conducta: se han roto formas, se han creado compromisos, se ha desfigurado la misión empresarial para convertirla en una simple y mecánica búsqueda del lucro.
Cierto es que las utilidades son una CONSECUENCIA del esfuerzo productivo, mas cuando se convierten en el fin que amerita y justifica el empleo de cualquier medio, entonces no sólo se denigra la profesión sino que se demerita el trabajo.
Claramente lo dice el autor Michael Novak en su libro "Business as a Calling" (Los negocios como un llamado).
"Los negocios son una profesión digna de los más elevados ideales y aspiraciones de una persona, lleno de grandes posibilidades: tanto de gran bien, como de gran maldad", dice Novak.
Más claro no canta el gallo, y más clara no puede ser la falta.
Una de las manifestaciones más importantes de una concatenación de "insensibilidades sociales" que ha conducido al empresariado nuevoleonés al fracaso, no sólo en el terreno económico sino en el liderazgo social que debe acompañarlos, tiene que ver con una pérdida total del sentido social de su misión.
Sobre todo, una falta de comprensión...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba