Dividen su amor de mamá
| Autor | Adrián Basilio |
MURAL/México
MÉXICO.- Una foto, pequeñas cartas, dibujos o un muñeco es el equipaje más preciado de las deportistas mexicanas que son mamás y competirán en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Si bien los hijos de Adriana Fernández, Victoria Palacios, Rosario Sánchez, Romary Rifka, Mayra González y Dulce María Rodríguez se quedarán bien resguardados con las abuelas o los esposos durante su participación olímpica, la lejanía siempre pesa y no pueden evitar sentir nostalgia.
Curiosamente las seis son exponentes de atletismo. Adriana es maratonista, Victoria y Rosario son marchistas, Romary practica el salto de altura, Mayra es velocista y Dulce combina el fondo y medio fondo.
Todas quisieran llevarlos consigo, pero limitantes económicas, aspectos técnicos y falta de lugares dónde hospedarlos, se los impiden.
Rifka dejará a su pequeña de dos años del mismo nombre con su mamá en Veracruz, ya que su esposo, el velocista Alejandro Cárdenas, también buscará la gloria olímpica en Atenas.
"Está difícil que nos la llevemos. Lo he platicado mucho con Alejandro, pero será muy pesado, porque obviamente no puede estar con nosotros en la Villa Olímpica. Entonces decidimos dejarla con las abuelas. Se va con mi mamá a Veracruz y los papás de Ale (originarios de Sonora) llegarán allá", revela Romary.
Sin embargo las palabras de aliento y las despedidas que tienen en casa o en el aeropuerto son un bálsamo que van dosificando durante el tiempo que están fuera del hogar.
"Me gusta cargar fotos de ella y por supuesto que lo haré para Atenas. De repente te vuelves como niño y ando cargando un muñequito o algo de ella, es como una forma de verla, de tenerla cerca", dice la saltadora de altura veracruzana.
A excepción de Rodríguez, quien tiene dos hijos, de 9 y 11 años, el resto asistirá a su primera justa olímpica alternando su faceta de deportista de alto rendimiento y mamá.
"Tuve a mis hijos cuando no era deportista. Ahorita ya entienden mi carrera, de hecho me acompañan a eventos nacionales. Me apoyan, siempre me alientan y eso me emociona y motiva, me presumen como 'mamá olímpica'", comenta Dulce, quien dejará a sus hijos con su actual pareja y entrenador, quien no viajará con ella.
"Durante los Juegos los dejaré con Rubén. Mis hijos saben que deben hacer su parte cuando mamá no está. Lo que les digo es que yo cumplo mi rol de mamá y de deportista, y que ellos deben cumplir el suyo en la escuela", afirma la...
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