Disfrutan la Ciudad
| Autor | Samuel Adam y Alfredo Páez |
Hay quienes deciden quedarse a disfrutar la capital, y tanto capitalinos como visitantes, se divierten con su familia, lo mismo a bordo de una bici, aros en desuso o jugando a los barquitos
Conducen su yate... pero a control remoto
En el Parque Lincoln, en Polanco, los niños se divierten rentando barquitos a control remoto para navegar en las fuentes del lugar, del lado de la calle de Julio Verne.
"Saldremos cuando baje la afluencia de vacacionistas. Mientras, traemos a los niños acá a divertirse", narra la madre de un menor que conduce su navío a lo largo de la fuente.
La renta de los barcos tiene un costo de 50 pesos por usarlos durante 10 minutos.
Los navíos son monitoreados por jóvenes que, botas a las rodillas, lo rescatan de un choque en la fuente o contra los de los otros niños menos experimentados.
También asisten, normalmente en domingo, personas con barcos propios o veleros fabricados por ellos mismos, y quienes aprovechan para visitar el aviario detrás de las fuentes y los juegos infantiles.
Gusta cerveza artesanal
Alfredo Páez
Las hay rubias, rojas, negras... Su cuerpo y su sabor las hacen únicas, tanto que cerca de noventa marcas ya se pelean el mercado capitalino.
Las hay con sabor a café tostado, chocolate, caramelo, frutales y hasta picantes, todas provenientes de pequeñas fábricas de jóvenes emprendedores.
Son cervezas artesanales, las cuales para exponenciar su sabor deben ser degustadas a la temperatura correcta, así como en la copa o tarro adecuados.
Hay de tipo 'ale', de alta fermentación y cuyo proceso ocurre en la superficie, y las 'lager', de baja fermentación y cuyo proceso se da en el fondo.
Pueden ser disfrutadas, principalmente, en locales del Centro Histórico, la Roma -Condesa y Polanco, y, en muchos de los establecimientos, hay especialista cerveceros que guían a los indecisos.
De acuerdo con Maribel Quiroga, representante de la Cámara Nacional de la Industria de la Cerveza, las marcas artesanales de esta bebida representan apenas el 1 por ciento del consumo total en el País.
Devuelven vida a juegos abandonados
En el Centro también hay quienes prefieren trepar, escalar, colgarse...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba