EN EL DINERO / Falsos dilemas

AutorJoel Martínez

En las últimas dos semanas, los reportes de la actividad económica en Estados Unidos han despertado la idea de que el rumbo no se ve tan mal, e incluso, hasta hay quienes han desechado el escenario de la recesión.

¿Por qué?

Básicamente porque la definición más simple de lo que es una recesión, sin tantas complicaciones metodológicas, es que existan dos reportes trimestrales consecutivos de crecimiento económico negativos.

Y esto no ha pasado.

Apenas hace unos días se anunció que el PIB de Estados Unidos del primer trimestre de 2008 fue bajo, pero positivo.

La evolución del crecimiento económico trimestral norteamericano ha sido de la siguiente forma: 0.6 por ciento en el primer trimestre de 2007, 3.8 en el segundo, 4.9 en el tercero, 0.6 en el cuarto y 0.6 en el primer trimestre de 2008.

Por ninguna lado se ve siquiera un trimestre con visos negativos.

Aún más, los reportes adelantados de la actividad económica del mes de abril, reportados la semana pasada, es decir para el primer mes del segundo trimestre de 2008, son débiles, pero no se ubican dentro de la zona técnica para que amenacen con el anuncio de un PIB negativo.

Para rematar, los datos de abril del mercado de empleo si bien fueron negativos, no tanto como los esperaba el mercado.

En pocas palabras, muchos analistas de las corredurías norteamericanas se han animado y sus pronósticos son de un crecimiento económico cercano a cero, pero positivo para el segundo trimestre de 2008.

Después, las estimaciones para el tercero y cuarto trimestres son con crecimientos superiores al uno por ciento.

Es decir, aquí no pasó nada, ni técnicamente veremos una recesión en 2008. El programa de regreso de impuestos anunciado en febrero de 2008 por el gobierno norteamericano está empezando a entrar en operación y eso recupera el crecimiento económico para la segunda mitad del año.

Bueno al menos eso leemos en muchas de las publicaciones de las corredurías que operan en Europa y Estados Unidos.

Sin embargo, la pregunta es si eso es lo que va a pasar, o si es lo que las grandes corredurías mundiales quieren que suceda, para así poder respirar de cara a una posible quiebra de su sistema financiero.

A veces me da la impresión que queremos olvidar que las pérdidas que hasta ahora se han reportado en el sistema financiero mundial, sobre todo norteamericano, si bien no son la punta del iceberg, apenas serían una tercera parte de las estimadas por el FMI.

De acuerdo con información recopilada de Bloomberg...

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