Diga ¡salud! a su cuerpo
| Autor | Adriana Durán |
Durante enero continúa la oleada de frío, si bien en el caso de México también son frecuentes los cambios de temperatura que provocan severos malestares en la salud. De ahí la importancia de reforzar las medidas preventivas a través de una buena alimentación.
"Tal vez parezca extraordinario y para algunos increíble, pero la verdad es que en la mayoría de los hogares contamos con alimentos que nos proporcionan proporcionan medidas efectivas para prevenir y tratar muchas enfermedades. Lo importante es consumirlos en las cantidades adecuadas y en combinaciones idóneas con otros productos.
"Esta terapeútica a través de la alimentación no es nada nuevo; nuestros ancestros dependían enteramente de esto y le brindaron un especial respeto a la comida diaria como fuente permanente de salud. Fue hasta el Siglo 20 en el que a partir de la publicidad y la mercadotecnia las drogas modernas superaron a aquellos remedios más suaves y aparentemente anticuados, tomados de la cesta de verduras y de la frutera", explica Anne Mcintyr, en el libro Bebidas Saludables, editado por Grupo Z.
Muchas frutas y verduras contienen una gran cantidad de componentes farmacológicamente activos, agrega. Ejemplo de ello es el jitomate, la zanahoria, el perejil y las hojas de diente de león, ricos en betacaroteno y vitamina C y que puede retardar el proceso de envejecimiento, aumentar las defensas y prevenir las enfermedades cardiacas y arteriales, así como algunos tipos de cáncer.
"Los cítricos como las fresas, el brócoli, las cerezas, la papaya, las uvas y el melón son ricos en vitamina C. Una fuente de bienestar es la combinación de jengibre y limón, bebida curativa popular en países como la India. Esta mezcla calienta el aparato respiratorio, elimina las flemas, alivia la tos y la congestión".
"También se puede preparar un jarabe de tomillo, otro de remedios excelentes para la tos, así como el jugo de col con zanahoria", detalla Mcintyr.
Para el dolor de garganta es bueno un jarabe de frambuesas y sidra. Comenta que esta antigua receta inglesa combina sabores dulces y amargos. Es un remedio tradicional para aliviar el malestar de la garganta.
"Un buen inhibidor de la gripe es una infusión, también de tradición inglesa, de flor de saúco y menta. Es una preparación común en el medio rural que combina ingredientes refrescantes y descongestivos. La menta ayuda a limpiar las vías respiratorias y baja la fiebre.
"Para la congestión catarral no hay como un licuado de jugo de...
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