Diez ideas contra la crisis

AutorJorge Basave, Javier Beristain Iturbide, Rolando Cordera, Mario di Constanzo, Julio Frenk Mora, Santiago Levy, Juan E. Pardinas, Carlos Rojas Gutiérrez, Luis Rubio y Jaime Sempere

Una decena de especialistas sugiere medidas concretas que podrían adoptarse de inmediato para hacer frente a la recesión.

Pactar con la banca

Jorge Basave

Director del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.

Deben tomarse medidas buscando resultados en el corto y el mediano plazos.

Las primeras con el objetivo inaplazable de dinamizar la economía interna: obras de infraestructura en ciudades, puertos y el campo, e iniciar de inmediato la construcción de la refinería anunciada con la reforma energética. De esta manera se contrarrestará el desempleo, que representa una gran amenaza para 2009.

En el ámbito monetario las tasas de interés deben permanecer lo más bajo posible para alentar el crédito. Un acuerdo- pacto con la banca comercial sería fundamental para elevar los niveles de crédito a la producción.

Las acciones del Banco de México no deben forzar al peso a sus niveles anteriores (sobrevaluados)

ya que un nivel mínimo entre 12 y 12.50 por dólar favorecerá exportaciones.

Con objetivos de mediano plazo, debe prepararse al país para la salida de la crisis.

Revertir la carencia de una política industrial activa y diseñar un proyecto estratégico de desarrollo económico con la participación del gobierno, el sector privado y el sector científico tecnológico del país.

Existen nichos tecnológicos que dinamizan la economía mundial en los que debe el país insertarse, como las telecomunicaciones y la electrónica. Para ello debe, en primer lugar, combatirse su monopolización (especialmente en servicios de telecomunicaciones) para que puedan realizarse inversiones en nuevas tecnologías que doten de competitividad a empresas en México y nos permitan diversificar nuestro comercio exterior.

Evidentemente, también debe apoyarse a las industrias sustentadas en recursos naturales que mantendrán precios al alza con la recuperación de la economía mundial, que se dará primero en los países asiáticos, especialmente en China e India.

Debe también invertirse en educación a todos niveles y en un sistema nacional de ciencia y tecnología.

"Un acuerdo-pacto con la banca comercial sería fundamental para elevar los niveles de crédio a la producción”.

Subsidiar empresas y proteger empleos

Javier Beristain Iturbide

Profesor emérito de Economía del ITAM y coordinador del Grupo Huatusco.

La crisis financiera y la recesión económica que agobian al mundo arrastran a México. Nuestro país puede verse más afectado que otras economías en proceso de desarrollo por su alta dependencia con la economía de Estados Unidos -país que ya está en una franca recesión- y por sus debilidades estructurales que han venido frenando el dinamismo de su economía desde hace varias décadas.

La recesión ya nos alcanzó. Quizá hagan falta algunos datos para confirmarla pero sus síntomas están presentes: caída de la producción industrial y de los empleos formales con acceso a la seguridad social. Para las familias éste es el dato que cuenta: en éstos y los próximos meses se crearán menos empleos que los necesarios para dar ocupación formal a los cientos de miles de jóvenes que cada año ingresan al mercado de trabajo y se destruirán decenas de miles de los empleos actuales.

La protección del empleo puede requerir apoyos fiscales de los gobiernos a las empresas. No se trata de disminuir contribuciones a los institutos de seguridad social, porque éstas son un componente del patrimonio y del bienestar de los mismos trabajadores. Se proponen apoyos por la vía de los impuestos federales sobre los ingresos de las empresas y de los impuestos estatales sobre las nóminas. Subsidios temporales claramente asociados a la conservación de los empleos en las actividades formales de la economía pueden contribuir a aminorar los impactos de la recesión sobre el empleo formal actual.

Pero eso no será suficiente. Los gobiernos federal, estatales y municipales deben hacer un esfuerzo mayor para orientar recursos hacia las inversiones en infraestructura y hacerlo pronto, alineando los intereses de las administraciones públicas, de las empresas y de la sociedad civil para destrabar proyectos de gran alcance que han sido pospuestos por la falta de acuerdos sociales. Además hay una nueva cartera de programas de inversión pública y privada que urge materializar para la creación de empleos y elevar la competitividad del país. No se trata de elefantes blancos ni de hacer hoyos para luego taparlos sino de inversiones para el crecimiento.

En este sentido el papel de los gobiernos locales es crucial. Las 25 ciudades grandes y medianas de México aportan el 75 por ciento del ingreso nacional. La obra pública urbana es un claro detonador de empleos donde más se necesitan y más pueden contribuir al crecimiento futuro. Los libramientos carreteros, las remodelaciones de centros históricos, la infraestructura de comunicaciones, transporte y abasto, las inversiones puntuales en la infraestructura escolar y hospitalaria son acciones de acupuntura local invaluables en el corto plazo para crear los empleos que demandan los jóvenes que egresan del sistema educativo medio superior y superior.

Lo urgente es la protección y creación de empleos. Pero lo que México necesita es una política de Estado para el crecimiento con equidad. El Grupo Huatusco de Economistas ha concluido que México sufre de un crecimiento económico insatisfactorio desde hace más de 25 años. Hemos padecido inflación y estancamiento y sólo en periodos muy cortos se ha crecido ligeramente con relativa estabilidad. Por ello el Grupo Huatusco llegó el 29 de noviembre a un consenso: recomendar al Congreso de la Unión la celebración de un gran foro nacional para que se formule y acuerde una política de Estado para el crecimiento con equidad.

"Hay que volver a crecer a tasas superiores al 5 por ciento por año, pero esto requiere una suma de voluntades y una causa común”.

Atender a niños y jóvenes

Rolando Cordera

Profesor emérito de la Facultad de Economía de la UNAM y coordinador del Seminario Universitario de la Cuestión Social.

Se deben tomar medidas para atender a un sector muy importante de la población que es el que más va a resentir esta crisis: los jóvenes. La demografía no existe en los planes del gobierno, ni en el discurso presidencial.

Las medidas anunciadas no toman en cuenta que la pobreza ya está en las ciudades y que en esa pobreza urbana los jóvenes son los que más resienten la falta de expectativas.

Los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR