Dice Buendía: sembré mucho

AutorYanireth Israde

Las plantas crecen hacia la luz, estiran el tallo hasta encontrarla. Así el arquitecto José María Buendía: alza la cara, persiguen sus ojos las lámparas que iluminan el Cine Tonalá, mientras arraiga su cuerpo en una butaca.

"Desde siempre tuve un jardín dentro, reconoce el autor de casas donde pulsa la poesía, dedicado también a la docencia, protagonista ahora del documental Yo quiero cambiarlo todo, que producen el arquitecto Alberto Kalach, Studio Chirika y Hormiga Films.

La sala del Tonalá, en la Colonia Roma, se ha desocupado. Hace un momento se exhibió el tráiler de la cinta durante la presentación de proyectos que buscan recursos financieros desde la plataforma Fondeadora.

"Me gusta meter la luz del cielo, dice en el filme Buendía, además poeta. E interroga: "¿Cuántas casas y edificios hay en el mundo a los que no entra la luz? ¿A quién le puede entrar la luz del cielo? ¿Al que vive al final, arriba? ¿Por qué darle privilegio a alguien de arriba y a todos los demás los friegas?.

Ahora Buendía está en receso académico, pero cuando enseñaba arquitectura emparentaba ésta con la poesía, suministradora de gozo y de misterio. Era la cátedra de un "enamorado, como él mismo se definió.

"Ha sido muy importante en mi vida, como seducción o subyugación, la proclividad, en el mejor sentido, al enamoramiento, dijo en una publicación de la UAM Xochimilco. "Es que el misterio está en la naturaleza, añade durante la entrevista, mientras examina los haces de luz del Tonalá y se recuerda como sembrador de sorpresas en el Pedregal, donde diseñó casas que huelen a flor de azahar por los naranjos que plantó.

"Había mucha roca, aprovechaba la naturaleza para...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR