Dice adiós con pachanga

AutorEnrique González

Polonia le pasó la estafeta como país invitado del Festival de Mayo a Austria, y a manera de celebración un combinado musical de aquel país y la Orquesta Filarmónica de Jalisco cerraron anoche la séptima edición del mismo, en lo que terminó literalmente en una pachanga.

Después de que la Secretaria de Cultura Sofía González Luna anunciara a los austriacos como los siguientes invitados, llegó la espléndida ejecución de dos conciertos de violín a cargo del polaco Mariusz Patyra, el primero de su compatriota Wieniawski, y el segundo de Paganini.

Ante una regular entrada, en la cual poco más de 200 personas hicieron falta para ocupar las mil 200 butacas que tiene el Degollado, Patyra y el director polaco Krzesimir Debski, conduciéndo la orquesta, lograron su mejor momento durante la apasionada de Paganini, lo cual les valió un aplauso de pie por parte de la mayoría del teatro.

Ya para la segunda parte toda formalidad desapareció, gracias a los contagiosos y bailables ritmos que aparecieron de la mano del quinteto de música popular Turnioki, peculiar agrupación de guitarra, bajo, teclado y hasta un flautista que se vistió de "gala" con sandalias y short para ponerle ritmo al final de la clausura.

Mientras tanto Debski se olvidó de dirigir y se bajó del podio para ponerse a bailar y brincar desaforado como cantante de rock, al final sacó su violín y acompañó la ejecución.

Una grata novedad que se estrenó anoche fue un ingenioso spot que, por medio del sonido del Degollado les suplicó a los asistentes que apagaran sus teléfonos celulares, quienes ante el humor del mismo no tuvieron más remedio que hacerlo y por primera vez en mucho...

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