Detrás de los Maestros
| Autor | Bertha Wario |
El único juicio real del arte es la historia. Eso lo sostiene Guillermo Sepúlveda, curador y museógrafo de Siglo XX: Grandes Maestros Mexicanos, proyecto que hasta la fecha ha recibido a casi 250 mil visitantes y que hace una semana abrió las puertas de su cuarto y último capítulo en Marco.
Nosotros somos simplemente gente sensible que estamos observando el fenómeno y lo vivimos y hacemos puente con el resto de la gente, pero la verdad se manifiesta en el tiempo.
Por otro lado, tenemos que hacer revisiones como ésta porque es una manera de estimular y acreditar a nuestros valores, si nadie lo hiciera, si no tomara nadie los riesgos, estas cosas se acaban o se agotan por falta de estímulos, señala sobre esta encomienda.
Habla con el peso a cuestas de una exposición que comenzó a gestarse antes de que terminara el siglo pasado y que desde diciembre del 2001 está a la vista en el museo regiomontano. Ahí, público local y foráneo se ha encontrado con José María Velasco, María Izquierdo, Rufino Tamayo, Leonora Carrington, Frida Kahlo, Remedios Varo, José Luis Cuevas y Manuel Felguérez, entre otros.
Cuando volteo hacia atrás digo ¡qué bueno que lo transité!, pero todavía no he tenido el tiempo de volver a decantarlo y empezar a emitir mi juicio, señala!
La maraña de cifras que transitaron por su cabeza es tan impresionante como el logro de que organismos y museos de la Ciudad de México facilitaran joyas pictóricas, que finalmente son patrimonio nacional, en algunos casos por vez primera.
Los aplausos se escucharon tanto aquí como en la Ciudad de México porque lo que allá me aplaudieron fue la insistencia, cómo logramos cosas que solamente se pueden hacer por nuestra condición de no rendirnos, muchos lo intentaron en otras regiones y no lo pudieron hacer, añade.
Salón de los prodigios
Cada fase ha tenido su encanto para los espectadores de la emoción de la primera exposición a la fascinación que provocó la segunda, con obras como Las Dos Fridas, sin olvidar el revuelo que provocó la presencia en vivo de los integrantes de la Ruptura en la tercera etapa, y esta última parte, titulada Prodigios de fin de siglo, no escapa de la afirmación.
El juego de las emociones inicia desde el color que llena las paredes de cada sala, un efecto que Sepúlveda asume como homenaje a Luis Barragán, Chucho Reyes Ferreira, Fernando Gamboa y Humberto Arellano, personajes de la arquitectura, pintura y cultura popular que pulieron su mirada.
Emocionantes han...
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