Destaca Garciadiego flexibilidad del Colmex
| Autor | Dora Luz Haw |
Las instituciones no se fortalecen con presupuesto; su éxito depende de su competencia para contar con un sistema capaz de renovarse y enriquecerse, advierte el historiador Javier Garciadiego, quien reflexiona en torno a la prosperidad de una iniciativa como El Colegio de México (Colmex).
Tras hacer una revisión sobre el génesis y desarrollo de este organismo de carácter universitario, dedicado desde hace 70 años a la investigación y a la enseñanza superior, su presidente reconoce que su trabajo y permanencia ha realizado grandes aportaciones al Estado Mexicano.
Las relaciones internacionales y los estudios demográficos, de género o económicos, no serían los mismos en México, si no fuera por la presencia de este centro académico que a su fundación, en 1938, llevaba el nombre de La Casa de España, advierte.
Gracias a la labor del Colmex, puntualiza, se dio en México la profesionalización del servicio exterior; se diseñaron políticas demográficas en el País; expertos como Jorge Bustamente, "descubren" el problema de los migrantes y personajes como Jaime Serra Puche colaboran en proyectos como el Tratado de Libre Comercio.
El egresado de la carrera de Ciencias Políticas de la UNAM y doctor en historia por el Colegio de México y la Universidad de Chicago, subraya que la primera aportación de La Casa de España fue salvarle la vida a un número considerable de intelectuales españoles, como una expresión más de la política exterior humanitaria del entonces presidente Lázaro Cárdenas.
La Casa comenzó a coordinar a estos intelectuales que representaban lo más actualizado del pensamiento de aquellos días, ya que muchos de ellos fueron formados en diversos países europeos como parte de la política educativa de España.
Daniel Cosío Villegas, entonces director del Fondo de Cultura Económica, destinó dos cuartitos de las instalaciones de esta institución. Algunos de estos pensadores comenzaron a traducir obras para esta casa editorial.
En principio se les otorgaría un asilo temporal mientras terminaba la guerra civil, ya que el diagnóstico era que ganaría el bando republicano, sin embargo, tiempo después quedó claro que los nacionales aventajaron y, en lugar de regresar, se incrementaron las solicitudes de intelectuales que deseaban venir a México.
En 1940 surge el Colmex como una institución permanente, orientada, en el periodo de Alfonso Reyes, a las humanidades. A partir del 59, el Colegio comienza a transformarse en una institución más abierta a la...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba