Desorden para recibir a Chivas en el AICM

CIUDAD DE MÉXICO, febrero 25 (EL UNIVERSAL).- La espera fue larga. Cuatro horas después de lo previsto, los aficionados de Chivas pudieron ver a los jugadores al momento en que el equipo arribó a la Ciudad de México, para al choque de este domingo ante Pumas.

El paso de los jugadores fue fugaz, tan sólo unos minutos, suficientes para que los ánimos se calentaran entre los simpatizantes y los policías que resguardaron el arribo del conjunto rojiblanco.

Los efectivos empujaron a algunos seguidores lo que provocó el conato de bronca. Gritos, empellones y el repliegue de los elementos de seguridad hacia las tribunas del AICM se observó en el momento más crítico. Fueron segundos de tensión hasta que los mismos seguidores del Guadalajara alejaron a sus compañeros; la situación se calmó conforme pasó el tiempo y hasta que los rijosos abandonaron el inmueble.

Así de caótica fue la llegada de los dirigidos por Matías Almeyda, quien fue el más custodiado y el que también recibió la mayor cantidad de muestras de apoyo a pesar del mal momento que atraviesan los rojiblancos y que los tienen en los últimos lugares de la tabla.

Se topan con Fierro, Gullit y AMLO. El arribo de...

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