Desfilan en París por la paz

AutorFernando Toledo

Los alegatos a la guerra han llegado a la Semana de la Moda de la Ciudad Luz, después de que varias firmas internacionales de alto lujo como Chanel y Vuitton cancelaran sus ventas con Rusia y firmas de low cost como Zara y H&M anunciaran el cierre de sus tiendas en protesta por la invasión a Ucrania.

Ahora, ha tocado el turno a Demna Gvasalia, director de la firma Balenciaga. Él nació en la región de Abjasia, en Georgia, y la tuvo que abandonar desde muy pequeño por las guerras que hubo en esta región del Caucaso.

"Esta guerra en Ucrania ha despertado el dolor de un trauma pasado que llevo en mí desde 1993, cuando lo mismo ocurrió en mi país y yo me convertí para siempre en un refugiado", escribió el diseñador de 40 años en una nota que recibieron los más de 500 asistentes, quienes habían recibido anteriormente la invitación en iPhones rotos.

En un ambiente gélido y triste, las modelos luchaban con la nieve y el viento para avanzar en una analogía de lo terribles que son las guerras. Muchas prendas en color negro y azul que se movían trabajosamente con sus portadoras acompañadas de grandes bolsas que parecían de basura o ideales para llevar las pertenencias cuando hay que huir de emergencia. La luz subía y bajaba para hacer todavía más dramático el espectáculo.

Esta firma, propiedad del grupo Kering de François-Henri Pinault, marido de Salma...

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