Señalan desequilibrio en turismo y patrimonio

AutorMaría Eugenia Sevilla

Existe un desequilibrio entre el "desmedido" desarrollo de centros turísticos, su consecuente crecimiento urbano y las políticas de conservación del patrimonio arqueológico en los estados que conforman la Ruta Maya, afirma el coordinador nacional de centros INAH, Edgardo García.

"Creo que no hay un equilibrio y que debemos provocarlo", señala en entrevista el comunicólogo egresado de la UNAM. "Nos vemos rebasados por el turismo y por las comunidades que buscan beneficiarse de él", reconoce.

El funcionario detecta a la falta de planeación como uno de los principales problemas que enfrenta la conservación del patrimonio cultural y natural en la región, que abarca los estados de Chiapas, Yucatán, Quintana Roo, Campeche y Tabasco.

La carencia de medidas que integren la protección del patrimonio dentro de los planes de desarrollo turístico en la zona se hace evidente en el Programa Mundo Maya, lanzado el pasado 23 de febrero por el titular de la Secretaría de Turismo, Rodolfo Elizondo Torres y los gobernadores de los cinco estados que conforman la Ruta Maya, que tiene como eje rector de la política turística impulsar el "turismo como prioridad nacional".

Dicho programa recibió 76 millones de pesos de particulares, así como de los gobiernos federal, estatal y municipal, para desarrollar productos y circuitos turísticos "aprovechando los atractivos naturales, históricos y culturales de la zona", cuya promoción será intensificada a través de un programa mercadológico que operará con un fondo de 20 millones de pesos.

Entre sus objetivos plantea "facilitar y promocionar la participación del sector privado como dinamizador de nuevas inversiones rentables" y si bien contempla la concientización de las comunidades indígenas de la región sobre la importancia de su integración a la actividad turística, el documento no hace alusión a medida alguna en dirección a amortiguar el impacto que los desarrollos turísticos y urbanos pudieran tener en la conservación del patrimonio.

"Debemos buscar entre los distintos órdenes de Gobierno que el desarrollo, a veces meramente turístico, se vincule más no sólo con la proporción de fuentes de trabajo, sino con el cuidado del patrimonio, el entorno ambiental y la atención social, en una visión integral", considera García, quien admite que ha faltado la articulación de los diferentes sectores.

En el escenario de apertura comercial que vive la zona maya, la Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicas del INAH, por sí...

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