Descuida Gobierno a sus contralorías

AutorLeslie Gómez

Los Órganos Internos de Control (OIC) de 7 de las 16 Secretarías de Estado del Gobierno del Presidente Felipe Calderón tienen graves limitaciones en su desempeño y padecen un conflicto de intereses, alertó el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).

De acuerdo con el estudio "Los mecanismos de rendición de cuentas en el ámbito ejecutivo de gobierno", elaborado por ese organismo, las contralorías internas dependen presupuestalmente de las dependencias en las que operan, pero reportan a la Secretaría de la Función Pública.

"Los OIC tienen una operación muy difusa que abarca desde la recepción de quejas, hasta la investigación y financiamiento de responsabilidades", indica.

Destaca que se trata de un problema estructural que tiene que ser resuelto para avanzar en materia de rendición de cuentas.

Especialistas del CIDE señalan en el estudio que en México, a pesar de los mecanismos y de los esfuerzos para modernizar el aparato administrativo público, la rendición de cuentas tiene deficiencias.

Destaca que los OIC son importantes, dado que son instrumentos para evaluar el desempeño de los funcionarios públicos.

Aunque reconoce que en algunos OIC existen herramientas útiles y diseños adecuados, indica que en todas las dependencias y las principales entidades del Gobierno federal, todavía no se ha consolidado del todo un sistema integral de evaluación.

"La rendición de cuentas consiste básicamente en la obligatoriedad de responder por las acciones o el comportamiento de uno mismo. En el caso de un servidor público implica, además, la responsabilidad de responder por las acciones y decisiones institucionales relacionadas con el uso y administración de los recursos públicos", apunta.

Ante ello, señala el estudio, los Órganos Internos de Control son indispensables para lograr un Gobierno transparente y una administración pública eficiente.

"Es necesario actuar en dos frentes. Uno está relacionado con la rendición horizontal de cuentas e implica contar con un órgano de fiscalización externo que fortalezca la división de Poderes y, por tanto, la democracia, pero el otro frente se relaciona con la rendición vertical de cuentas y requiere de un órgano interno de control sólido", destaca.

En tanto, el CIDE indica que la desvinculación de normas, instituciones y rutinas establecidas en la última década a favor de mayor control de los recursos públicos, de la evaluación de los gobiernos, las dependencias, los programas y los servidores públicos...

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