Descenso vertiginoso
Fotos: Diego Gallegos
SALTOS MORTALES desde montañas y terrenos escarpados, carreras contra reloj y brincos espectaculares en bicicleta que retan el vértigo de cualquiera, eso es el Downhill.
Los accidentes y el peligro se encuentran en cuelquier vereda cuando se practica este deporte, pero eso a Lorena Dromundo no le importa, ya que desde hace varios años esta disciplina se ha convertido en su pasión.
Ser la única mujer que representa a México en este deporte de manera profesional no es ni una carga ni un sacrificio, al contrario, Lorena sonríe cada vez que alguien le repite que ella es la única.
Orgullosa por portar la bandera mexicana a nivel mundial, la joven de 21 años sabe que no la tiene fácil, pero eso no le quita las ganas de ser de las mejores en todos los aspectos.
"Me da mucho orgullo representar a las mujeres en este deporte, que es peligroso y que se cree sólo para hombres, por el riesgo, pero sí me gustaría que hubiera más niñas, como cuando voy a competir al extranjero, ser la única en México es un orgullo", comentó.
Para ella competir con hombres ha sido un reto, pero le ha ayudado a aumentar su nivel y a perderle el miedo a las competidoras extranjeras cuando sale de México.
"Competir contra hombres no lo he visto como algo que me limite, al contrario, me ha dado mucho más nivel estarme midiendo contra hombres y ganarles; eso me funciona mucho más para cuando voy a competir a un mundial contra mujeres, pues no me intimidan porque estoy acostumbrada a correr contra hombres", aseveró.
Lorena empezó muy chica en el Downhill, a los 12 años cuando, sin saber el nombre del deporte, le pidió a su padre que la llevara al Ajusco para aprender.
"Venía al Ajusco, porque desde los seis años hacia equitación, a los 12, regresando de entrenar, pasé por el campo y vi que todos tenían sus bicis, le pedí a mi papá que me llevara a ver que hacían, entonces nos acercamos y nos dijeron que nadamás necesitábamos una bici, comprarse casco y rodilleras, y lo probé y me encantó, desde ahí empecé a venir cada fin de semana", aseguró.
Dromundo comenzó a figurar dentro de este deporte, empezó a competir, y a ganar carreras.
"Se convirtió en trabajo a los 17, cuando gané mi primer Panamericano, esa fue la puerta a nuevas oportunidades dentro del ciclismo", dijo.
En un deporte como el Downhill, nunca faltan los accidentes, que Lorena ha vivido en carne propia.
"En junio del 2012, en Nueva York, en una copa del mundo, salté de un contenedor y no...
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