Denuncia sicario a Gutiérrez Rebollo
| Autor | Abel Barajas |
Alfredo Hodoyán Palacios, "El Lobo", sentenciado a 50 años por ser sicario de los Arellano Félix, dijo ante un juez federal que cuando fueron perseguidos en el sexenio pasado, el General Jesús Gutiérrez Rebollo confinaba a los miembros de su organización durante meses en el Campo Militar Número Uno.
Sin orden de aprehensión y sin orden de arraigo, algunos integrantes del Cártel de Tijuana llegaron a estar detenidos hasta medio año, "paseándolos" en Ensenada, Tijuana y Guadalajara para identificar casas de sus cómplices.
Luego eran presentados como detenidos por la Procuraduría General de la República.
Los servicios de delación llegaron a ser pagados con el asesinato de los propios traficantes que colaboraban con las autoridades, según Hodoyán.
El pasado 4 de septiembre, en el penal de máxima seguridad de La Palma, tuvo lugar una audiencia inédita: lo que las autoridades consideran como la cúpula del Cártel de Tijuana, estuvo reunida por primera vez en una diligencia judicial.
Frente a frente, comparecieron en la misma sala Benjamín Arellano Félix; el presunto lavador de dinero Jesús Labra Avilés "El Chuy"; Ismael Higuera Guerrero "El Mayel", operador de la banda, y Alfredo Hodoyán "El Lobo".
El careo se llevó a cabo por petición de "El Chuy" Labra, para demostrar que no conoce ni tiene relación con los otros presuntos narcotraficantes. Todos ellos dijeron no haberse visto antes, pero Hodoyán aprovechó el interrogatorio para hablar de su hermano Alejandro, desaparecido desde el 5 de marzo de 1997.
"A mi hermano lo trajeron paseando por diferentes ciudades del país como México y Guadalajara, después lo llevaron a Ensenada y de allí a Tijuana, con el fin de que señalara casas de personas, cosa que él dijo que no hizo, ya que ni siquiera conocía a esas personas.
"Después lo regresaron de vuelta a Guadalajara y lo llevaron de nuevo al Campo Militar Número Uno, donde había estado detenido anteriormente, lugar en donde había otros detenidos. Me dijo los nombres: eran Fausto Soto Miller, Francisco Cabrera Castro, Gilberto Vázquez Culebro, Carlos Zarco, Edgar González, Javier Escalante y otro que le decían 'El R-10'", narró Hodoyán.
El primero de ellos está acusado de lavar dinero, los otros fueron los asesinos materiales del subdelegado de la PGR en Baja California, Ernesto Ibarra Santés, ejecutado en septiembre de 1996 en la Ciudad de México.
Del personaje que sólo identifica como "El R-10", dice que fue detenido por el Ejército y de inmediato...
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