Deleite pausado

AutorAnaline Cedillo

Enviada

CAYO CAULKER.- Apenas ponemos un pie sobre la pista del sencillísimo aeropuerto de Cayo Caulker, los cuerpos se contagian del ritmo de los tambores que toca un grupo de músicos de la etnia garifuna.

Sus melodías ponen de manifiesto el mestizaje africano y caribeño que distingue a los miembros de esta comunidad, quienes actualmente habitan en Honduras, Guatemala, Nicaragua y Belice. La cálida bienvenida se pone aún mejor cuando alguien reparte cocos helados mientras esperamos las maletas, aún sobre la pista.

El viaje en avioneta desde Ciudad de Belice no dura más de 20 minutos. Otros viajeros llegan por ferry desde Chetumal, Quintana Roo, pero el trayecto toma más de una hora.

Al noreste del país centroamericano, la llamada "Isla Cariñosa"

no rebasa los mil habitantes y es uno de los cayos beliceños más populares, después de Ambergris, donde está el puerto de San Pedro (o San Pedrou, como cantara Madonna en "La isla bonita").

Sus cálidas aguas color turquesa y los tesoros subacuáticos del arrecife de coral son lo que más atrae a los visitantes.

Para contemplar cientos de peces de colores, todo el año hay excursiones de esnórquel y buceo; entre abril y septiembre se pueden avistar tortugas marinas y hasta manatíes. Algo más nuevo es la práctica del stand up paddle y kayak.

Vamos hacia el hotel a bordo de carritos de golf que hacen las veces de taxis. Estos son los vehículos más sofisticados que vemos en la isla, donde por supuesto no hay semáforos y los caminos son aún de arena. Lo más común es ir de un lado para otro a pie o en bicicleta -varios alojamientos las rentan o prestan.

Aunque el turismo ha transformado a este pueblito de pescadores, la atmósfera es tan tranquila que el lema de la isla es go slow (ir lento). Por años, Cayo Caulker ha estado en primer sitio de la lista para los mochileros, pero ahora no es raro encontrar también lunamieleros o familias de Norteamérica, Europa o Asia, que llegan seducidos por sus casitas de madera de colores y listos para...

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